Las paradas improvisadas y sin autorización por parte del servicio de transporte público de minibuses en diferentes vías de la urbe alteña, provocan congestionamientos y causan la molestia de la población.

A falta de un reordenamiento del tráfico vehicular desde los anteriores gobiernos municipales en varias zonas céntricas de la Ceja de El Alto, continua provocando grandes congestionamientos de los minibuses del servicio sindicalizado, donde calles y avenidas ya no cuentan con carriles despejados para la circulación del transporte libre y motorizados particulares.

Los sectores más conflictivos convertidos en paradas que no cuentan con autorización del municipio, han copado en varios casos toda la vía como la avenida 6 de Marzo, donde los cuatro carriles que tiene cada calle en muchas ocasiones ya no tiene lugar para la circulación vehicular, donde los minibuses se estacionan durante varias horas hasta lograr que sus motorizados se llenen de pasajeros.

Este aspecto, que también se ha dado en vías adyacentes a esta avenida principal como la zona 12 de Octubre, desde la calle 2 hasta la 5 y 6 se encuentran llenas de paradas improvisadas de los minibuses del transporte sindicalizado, sin que exista autoridad municipal o del Órgano Operativo de Tránsito que pueda controlar.

Varios fueron los intentos de solucionar este problema por parte de las autoridades municipales que a través de la Guardia Municipal de Transporte, trataron de descongestionar, pero el número del parque automotor en la ciudad de El Alto, que se ha incrementado en los últimos años, ha dado lugar a que este tema sea casi imposible de solucionar.

Las vías alternas a la avenida 6 de Marzo, como las calles Jorge Carrasco, Raúl Salmón de la Barra, avenida Tiwanaku, entre ellos la avenida Antofagasta, cuentan con paradas improvisadas de este sector del transporte que no dejan espacios para la circulación de otro tipo de motorizados, provocando que todos los días existan estos problemas de las trancaderas que dan lugar a que un usuario para dirigirse a un destino diferente desde la Ceja de El Alto, tenga que esperar más de una hora para que un minibús salga del atolladero, tanto hacia Río Seco, Ballivián o Senkata.

Por su parte, la Federación Andina de Choferes 1ro. de Mayo de El Alto, a la cabeza de su dirigente Víctor Tarqui, se comprometió en coordinar con los diferentes sindicatos afiliados a su organización, para solucionar el problema, pero a la fecha continúan los congestionamientos.

Como justificando a la poca importancia que le da este directorio al problema se han implementado los denominados controles sindicales, donde participan los mismos choferes de diferentes sindicatos, pero no controlan estos temas, sino solo se limitan a efectuar control de tráfico, olvidándose de los congestionamientos y los trameajes.

Los usuarios que tratan de denunciar estos abusos a este grupo de personas solo reciben como respuesta, que no están autorizados para controlar este tipo de temas, actitud que los convierten en cómplices de las irregularidades que cometen sus compañeros.