De acuerdo con exámenes genómicos se detectó las sub variantes de omicrón, BQ.1 y BQ .1.1. Ambos virus tienen un mayor nivel de transmisibilidad.
Auza explicó que la BQ.1 fue detectada en el departamento de La Paz a principios de noviembre, mientras que la BQ .1.1., en Santa Cruz, en octubre.
Ente los síntomas de los nuevos virus están: tos, dolor de garganta, fatiga, malestar general, diarrea, congestión, secreción nasal, dolor de cabeza, fiebre, dolores musculares, pérdida del olfato o el gusto, sensación de falta de aire y aceleramiento del ritmo cardíaco.
“La presencia de estas subvariantes puede contribuir al crecimiento de casos”, alertó el ministro, quien precisó que se continuará con la misma estrategia que se emplearon en las anteriores olas.
Por eso, las medidas de bioseguridad deben mantenerse; uso del barbijo, lavado y desinfección frecuente de manos, entre otros.
Durante la última semana, se presentó un leve incremento de casos de Covid-19, 531 en total, que significan un incremento de 53% con respecto a la semana pasada que fue de 348.
Para el Colegio Médico de Bolivia estos hechos son prueba de que se estaría ingresando a una sexta ola “Estamos iniciando la sexta ola, lógicamente se marca desde el aumento de casos. Seguramente en unos 20 a 30 días se va hacer sentir en el país, el uso de barbijo tiene que seguir”, indicó el presidente del ente colegiado, Luis Larrea.
COQUELUCHE
Respecto a los casos de coqueluche, el ministro Auza, detalló que hasta el fin de semana se reportó 52 contagios, de ellos, 44 ya están recuperados, seis se encuentran activos, 38 son menores de cinco años y 12 mayores de 5 años.
La mayoría de los contagios se registraron en el departamento de Santa Cruz, por lo que la autoridad denunció la falta de atención de las autoridades de esa región.