“Cerrado”, así está escrito en un papel blanco improvisado y colocado en la puerta de ingreso del Museo de la Revolución Democrática Cultural de Orinoca más conocido como el “museo de Evo”. La historiadora, Sayuri Loza, criticó el gasto económico insulso que se hizo para la construcción de ese espacio cuando las personas están muriendo por un tratamiento de cáncer.
“(Lo que se debe preguntar es) ¿por qué se ha construido este museo? ¿para qué servía? Estamos a cinco años (y) hace dos años que está cerrado, nadie quiere hacerse cargo de la administración, dijo el exasambleísta departamental Limbert Maceiros.
La última visita que los administradores del museo difundieron a través de su página de Facebook fue el 14 de enero de 2020. Ese día llegaron ocho visitantes del departamento de Santa Cruz y la publicación está acompañada de fotografías.
En febrero de 2017, el museo fue inaugurado sobre una superficie de 12.000 metros cuadrados en el pueblo natal de Evo Morales. La construcción demandó un costo de 7,1 millones de dólares y la infraestructura cuenta con salas de exposiciones, centro de documentación, biblioteca, cafetería, tienda y demás ambientes propios de un repositorio moderno.
El museo está divido en tres grandes bloques. El primero se denomina Inchura (puma), donde se expone las relaciones interculturales y las luchas de los pueblos originarios a través de la historia. El segundo bloque se llama Sullca (llama) muestra las ideas fundamentales de la práctica cultural de los pueblos indígenas originarios de Bolivia. El último bloque es denominado Collana (quirquincho) y reúne un centro de documentación las transformaciones sociales, políticas y culturales vividas en el país desde el año 2005. En este espacio se exponen los objetos del expresidente Evo Morales.
En ese espacio se exhibe una estatua de tamaño real de Morales, retratos con líderes mundiales, títulos de doctor Honoris Causa de varias universidades, camisetas de fútbol de su colección, recuerdos de su niñez, la trompeta que tocaba de joven, regalos que recibió en sus mandatos y otras curiosidades.
CRÍTICA
La historiadora, Sayuri Loza, explicó que los objetos que se encuentran en el Museo de la Revolución Orinoca son modernos y no son reliquias contemporáneas porque están los zapatos, la ropa y una estatua de Evo que no generan muchas visitas, como ocurre con el museo de la Revolución de la Habana Cuba donde también está la ropa del revolucionario cubano Camilo Cienfuegos Gorriarán y algunas notas de Ernesto Guevara, pero tampoco le dan ingresos económicos.(ANF)