“Haciendo el análisis del conjunto, hemos tenido la última semana epidemiológica un ascenso del 8%; es decir, la semana dos tuvimos 6.591 casos y última semana hemos tenido 7.123. Entonces, hay un ligero ascenso y estaríamos entrando a una etapa de meseta”, indicó la secretaria municipal de Salud Integral y Deportes, Cecilia Vargas.
La funcionaria afirmó que según los análisis municipales y según las proyecciones realizadas anteriormente, esta semana que es la cuarta epidemiológica del presente año, se presentaría el pico de la cuarta ola de la pandemia y se extendería a dos o tres semanas o incluso un mes.
Luego de ese tiempo, los casos descenderían y que podría ser la última semana de febrero. “Consideramos que va a ser una meseta de dos a tres semanas de mucho cuidado, sin embargo hay que considerar que si estaría predominando la variante ómicrom, ese descenso puede ser más agudo”, agregó Vargas, en una entrevista en Radio Panamericana.
Remarcó que la vacunación que se efectuó a la población mayor de 18 años anteriormente tuvo resultados positivos, ya que las personas contagiadas presentaron síntomas leves y moderados, y ello se refleja en la ocupación actual de los hospitales municipales.
Según el último reporte, el 80% de las camas de terapia intensiva se encuentran ocupadas y en la mayoría por personas no vacunadas. En tanto, las áreas en piso serán ocupadas en un 60% por pacientes con síntomas moderados.
Agregó que los pacientes vacunados registran una mejora y evolución positiva en su salud, en comparación a los no vacunados que tienen progresos lentos.
“Sí, hay infectados vacunados, pero no están en terapia intensiva o son casos excepcionales, pero su evolución es positiva, mejoran; en cambio los otros (no vacunados) no, siendo que los protocolos son los mismos. Las personas internadas en terapia intensiva no vacunadas, son quienes tienen la peor evolución”, explicó Vargas.