Desde tempranas horas, vestidos con overoles, guantes, barbijos y “armados” con escobas, bolsas, palas y picotas, entre otros materiales, decenas de funcionarios ediles alteños realizaron la limpieza de los tres cementerios municipales que hay en esa urbe para que estén en buenas condiciones y recibir a los ciudadanos que visiten los nichos de sus difuntos. Mientras sus pares de La Paz planificaron el cierre de vías.
Los camposantos de Tarapacá, en el Distrito 1; Mercedario, en el 4 y Villa Ingenio, en el 3; fueron embellecidos, “incluso lavamos los nichos, gracias a la cisterna que vino”, dijo uno de los voluntarios que apoyaba en el recojo de escombros en el cementerio Mercedario.
El subalcalde del Distrito 4, Juan Chura, señaló que los funcionarios de varias reparticiones ediles participaron de la cruzada de limpieza y que, en estos días, colocarán contenedores, basureros y tachos de agua. Apuntó que la basura fue seleccionada en orgánica e inorgánica, además, se acopio plástico y metal.
El trabajo fue apoyado por maquinaria pesada como motoniveladora y topadora. En el caso del cementerio Mercedario, con el fin de mejorar las vías, también se intervino las avenidas Costanera y Alcoreza, que sirven de ingreso al lugar.
Al finalizar la labor, Chura pidió a la población conservar limpio el camposanto y recordó cumplir las restricciones que se aplicarán al interior y en inmediaciones, como la prohibición de armar mesas, consumo de bebidas alcohólicas, no ingresar grupos musicales y no olvidar las medidas de bioseguridad.
Cierre de vías
En la ciudad de La Paz, con el fin de resguardar la seguridad de los visitantes al Cementerio General, durante el 1 y 2 de noviembre, la administración del sitio en coordinación con la Sub Alcaldía Max Paredes definió cerrar el tráfico vehicular dos cuadras a la redonda del camposanto.
El director interino del lugar, Jorge Vargas, sostuvo que en esa área solo podrán circular peatones y se permitirá la comercialización de flores y otros productos. “El ingreso de vehículos está prohibido y las personas van a tener que caminar de dos a tres cuadras antes de ingresar”, mencionó.
En tanto que, personal de la Guardia Municipal de transporte en coordinación con efectivos de la Policía resguardarán las calles aledañas a la necrópolis paceña. También se controlará actividades económicas de expendio de bebidas alcohólicas.
Estiman que participen unas 300 personas; entre funcionarios, Guardia Municipal, efectivos policiales y de Bomberos Antofagasta. Además, cada una de las nueve puertas de ingreso y salida del camposanto estará vigilada por grupos de seis personas. Se hará similar labor en el Cementerio La Llamita.