La retardación de la obra del viaducto Belisario Salinas es rechazada por los vecinos del sector, reclaman por la inseguridad y el perjuicio que provoca la tardanza, el trabajo debía entregarse en noviembre de 2021, expresaron.
Quienes viven en inmediaciones de la avenida 20 de Octubre, plaza Abaroa y áreas circundantes, donde se construye el viaducto Belisario Salinas son los más afectados junto a los eventuales transeúntes y conductores de motorizados.
Los vecinos y comerciantes del lugar cuestionaron los casi cinco meses de tardanza en la entrega de la obra que inició el 23 de junio de 2020 y debía concluir en 343 días, es decir, noviembre de 2021.
Según un sondeo de opinión, el cierre de las calles y la falta de control provocaron que estas áreas se conviertan en inseguras para la población, porque existen personas que se dedican a consumir bebidas alcohólicas en sus alrededores. Además, que muchos negocios registraron la disminución en sus ventas y la dificultad de ingresar a sus negocios, más aún cuando tienen cargas.
“Ya debería haberse entregado, porque en las noches es muy peligroso. Hay jóvenes que están mareados y golpean las puertas (…) Afecta (a los negocios). Antes, había clientes en la mañana, en la tarde y en la noche; ahora, ya no”, indicó Rubén Tarqui, propietario de un negocio.
Otra vecina reprochó la falta de seguridad en el lugar, porque los delincuentes se aprovechan del cierre de las calles, donde se cometen asaltos. Calificó este cierre como un “enclaustramiento” a los vecinos y vecinas del lugar porque ellos se ven impedidos de transitar libremente.
“Es un perjuicio total porque han dado un tiempo para entregar (…) Estamos totalmente enclaustrados, no hay paso a la Sánchez Lima, hacia la 20 de Octubre espero que habiliten pronto. Es inseguro ahora que se está activando un poco la vida normal, hay un poco más de gente, pero el año pasado era muy inseguro, es como un callejón, habían asaltos, atracos a señoritas a jóvenes además de ser un perjuicio también es un peligro”, indicó Magaly Castellón propietaria de un negocio de comida.
Una transeúnte mostró esperanzas de que esta obra sea de alto impacto porque pretende conectar las zonas de Miraflores y Sopocachi para reducir el congestionamiento vehicular que se registra en las zonas y más aún en horas pico, publicó ABI.
“Siempre y cuando se tenga responsabilidad de la empresa constructora, de los vecinos, del apoyo (de la Alcaldía) pienso que está bien. A que no hagan nada, pienso que esta obra, aunque sea pequeña, está bien”, indicó Beatriz Silva.
En la visita que realizó ABI al lugar, se pudo evidenciar que los vecinos y transeúntes que recorren el lugar sufren dificultades, al menos cinco personas sufrieron tropiezos.
Aún es más complicado para las personas que están con cochecitos de bebés, con niños, bultos y peor para las personas de la tercera edad.
La obra del viaducto de la Belisario Salinas fue adjudicada a la Empresa Constructora el Ceibo SRL con una orden de proceder del 4 de marzo de 2020. Esta obra inició el 26 de junio del mismo año y se anunciaba su conclusión en 343 días, es decir noviembre de 2021; sin embargo, la entrega fue reprogramada hasta el 30 de marzo de este 2022.
Tras una inspección sorpresa de la concejal Roxana Pérez del Castillo, se evidenció que la obra tiene demoras. La autoridad duda que en dos semanas se pueda realizar la entrega anunciada.
La Agencia Boliviana de Información intentó comunicarse con los funcionarios de la Alcaldía para conocer los motivos de los retrasos; sin embargo, no se obtuvo resultados. Asimismo, durante la visita al lugar, los encargados de la obra se negaron a dar información.
Anteriormente, el 29 de enero, la Alcaldía de La Paz informó que corresponde a la estatal Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas) concluir con los trabajos de interconexiones de matrices y de conexiones domiciliarias previo a las labores civiles para la conclusión del viaducto Belisario Salinas, ubicado en el corazón de Sopocachi.
“Hubo un retraso considerable en la aprobación en los diseños de los componentes de agua potable y alcantarillado sanitario pluvial, que corresponde a Epsas que emita su aprobación, revise y apruebe; y una vez que concluya con la aprobación y ejecución de trabajos que tiene que hacer propiamente Epsas, me refiero a las interconexiones de matrices y de conexiones domiciliarias, nosotros vamos a poder encarar el resto de los trabajos que quedan pendientes”, informó en Unitel, el secretario municipal de Infraestructura Pública (Smip), Boris Bacarreza.
El funcionario municipal anunció la culminación de los trabajos de la construcción del viaducto Belisario Salinas para marzo. “Se ha tenido que aprobar un contrato modificatorio que nos modifica la fecha (de entrega) hasta el 30 de marzo”, indicó el titular de la Smip.
En febrero, el burgomaestre Iván Arias recordó que el año pasado propuso a los vecinos acelerar las obras del viaducto con trabajo nocturno, pero no encontró apoyo a su sugerencia por lo que la obra se demoró debido a las lluvias.
“Queríamos hacerlo rápidamente, pedimos permiso a los ciudadanos que nos permitan trabajar 24 horas y no nos dejaron, y por eso la obra se ha retrasado y a eso se ha sumado la lluvia; estamos esperando que Epsas nos ayude para avanzar”, añadió la autoridad en esa ocasión.