A la vez, Gualberti afirmó que es hora de que las autoridades, los sectores sociales, de educación y los medios de comunicación trabajen juntos para la prevención de los hechos de violencia. Además, pidió formar a las nuevas generaciones en valores humanos y cristianos, respeto a la vida y la dignidad de cada persona, como bienes sagrados e intocables.
“Estos hechos, además de ser delitos horrorosos son pecados gravísimos ante el Dios de la vida. Es necesario que se asuman medidas ejemplares para que los feminicidios no se conviertan en una epidemia”, manifestó monseñor Gualberti.
De acuerdo con los datos del Ministerio Público, en lo que va del año se contabilizaron 38 casos en todo el país. En La Paz se registraron 10 casos, 8 en Santa Cruz, 7 en Cochabamba, 5 en Oruro, 3 en Potosí, 2 en Beni, 2 en Chuquisaca y 1 en Pando.
Durante la homilía dominical exhortó a los católicos a ser mensajeros de esperanza y ponerse al servicio de la reconciliación, la unidad y la paz, donde nunca falta la presencia del mal, el odio y de la violencia. “Particularmente nos tiene que cuestionar a todos la sangre de tantas mujeres y niños inocentes ultrajados, asesinados vilmente en nuestro país por el machismo y violencia ciega”, agregó.
A la vez, pidió a la población a ser parte del proyecto de salvación y ser solidarios con los sectores más necesitados para luchar contra la injusticia.
“No amemos con la lengua y de palabras sino con obras y de verdad. No podemos quedarnos en puras palabras o buenas intenciones, sino que el amor a Dios y al prójimo nos tiene que mover a entregarnos sin medida al proyecto de salvación de Dios, compartir y ser solidarios con los pobres y necesitados, luchar en contra de las injusticias”, dijo en su mensaje, reflejó ANF.
Al haberse iniciado el mes de mayo exhortó a unirse a la convocatoria del papa Francisco y participar en la Maratón de la Oración a la Virgen María para que ella nos ayude a vencer a la pandemia, pero también a todos los males físicos, morales y espirituales que nos aquejan.