De acuerdo con la autoridad del municipio, el control se efectuó a denuncia de muchos vecinos de este barrio del Distrito 4, negocio que se encontraba en inmediaciones de la Universidad Pública de El Alto, donde se expendía bebidas alcohólicas adulteradas además de los horarios no permitidos, según las normas.
“Son negocios que no están permitidos su funcionamiento, pero lamentablemente los propietarios de los mismos se dan modos para abrir estas discotecas clandestinas y lo peor es que permiten la presencia de menores de edad como en el presente caso, donde estos tres menores inclusive se encontraban con el uniforme de sus colegios”, señaló el Intendente.
Como en estos casos corresponde los tres menores fueron remitidos a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia (DNA) del municipio de El Alto con la finalidad de que puedan ser entregados a sus progenitores sin antes conocer los antecedentes de la relación de familia que tienen estos tres menores en cuanto al control que deben ejercer los padres.