El ministro de Salud, Edgar Pozo, informó ayer que se emitirá una norma para reducir el tiempo de exposición de personas en eventos culturales y centros públicos, además de que se prohibirá que los choferes del transporte público trabajen sin barbijo y con voceadores, con la finalidad de frenar los contagios del Covid-19.
“A través de un instrumento legal se va a reducir las horas de desarrollo de actividades culturales, deportivas, religiosas, etc., reducir el tiempo de exposición al virus (..). Esto mismo se aplicará en los centros comerciales, los restaurantes, con las tiendas de belleza, peluquerías, donde hay muchísima contaminación en las peluquerías”, dijo la autoridad en conferencia de prensa.
La norma tendrá capacidad coercitiva, agregó, como parte de una posición gubernamental.
En el caso del transporte público, Pozo detalló que se prohibirá que los choferes del transporte público, sobre todo en las ciudades capitales, trabajen sin barbijo, porque dejaron de cumplir todas las disposiciones de bioseguridad establecidas desde el inicio de la pandemia del Covid-19.
“Segundo se prohíben los voceadores, esos que van gritando en la ventana exponiéndose al viento, al frío, a la contaminación de noche y de día”, sostuvo.
El titular de Salud manifestó que se exigirá también a los conductores de los vehículos públicos que repongan el distanciamiento social con pasajeros sentados de manera intercalada porque “no lo están cumpliendo”.
Asimismo, establecieron que las instituciones públicas y privadas tienen la obligación de exigir a sus empleados que cumplan con el uso del barbijo y el lavado de manos con jabón para evitar la proliferación de casos de Covid-19.
“Toda institución pública del Estado o privada debe establecer que sus empleados obligatoriamente deban portar los mecanismos protección, barbijo. Tienen que tener facilidades de acceso a lavamanos con jabón y hacer que sus empleados utilicen estos dos elementos, agua y jabón”, manifestó en una conferencia de prensa.
El titular en Salud recomendó que el lavado de manos se realice múltiples veces durante las horas de trabajo.
“Eso es lo que tienen que hacer las empresas públicas (y privadas), facilitar que el trabajador tenga agua, jabón y barbijos”, reiteró.
La autoridad gubernamental dijo que se precisa reforzar el cumplimiento de ambas medidas de bioseguridad porque el Covid-19 está “difundiéndose de manera exponencial” en todo el país.
Centros
También informó que se habilitarán dos centros de aislamiento para pacientes con Covid-19, que funcionarán en el Hotel Deportivo de la zona de Alto Obrajes y el Coliseo Cerrado “Julio Borelli” de la calle México, de la ciudad de La Paz, además de otro en la Villa Olímpica en Cochabamba, como parte del plan integral de lucha contra la pandemia.
“La Paz va a inaugurar en tres o cuatro días más el centro de aislamiento de Alto Obrajes, es un hotel dependiente de la Gobernación de La Paz (...) El otro probablemente en un par de semanas, porque hay que trabajar en su implementación en el Coliseo Cerrado”, dijo en conferencia de prensa. (ABI)
La autoridad gubernamental explicó que el Hotel Deportivo contará con cerca de 90 camas, pero se espera que reciba a unas diez más con el transcurso de los días.
El Coliseo Cerrado “Julio Borelli”, agregó, será sometido a modificaciones estructurales para contar con espacios de aislamiento de pacientes.
El titular de Salud apuntó que otro centro de aislamiento será abierto en la Villa Olímpica de la zona de La Tamborada de la ciudad de Cochabamba, el cual se suma a varios con 500 camas habilitadas en la ciudad de Santa Cruz.
El Ministro de Salud admitió ayer que Bolivia atraviesa la segunda ola de la Covid-19 con características muy similares a las de julio de 2020 y una escalada muy rápida de casos.
“Estamos también tratando de que en el otro nivel de regiones como son Potosí, Tarija, se haga lo mismo. Los gobernadores y los alcaldes se están preocupando para que todos los departamentos tengamos diferentes centros de aislamiento”, acotó.
En la víspera, el Ministerio de Salud reportó que los casos de COVID-19 continúan en ascenso con 2.263 nuevos contagios en Bolivia, una de las cifras más altas registradas hasta la fecha desde el inicio de la pandemia. ABI