Luego de las acusaciones sobre el envío de “material bélico” por parte del Gobierno argentino durante la crisis post electoral de 2019, el exembajador de la República Argentina en Bolivia, Normando Álvarez García, negó que en 2019 se haya autorizado el envío de material antidisturbios o similares para apoyar a las Fuerzas Armadas y policiales del país como denunció en las últimas horas el canciller del Estado, Rogelio Mayta.

El ex representante diplomático del vecino país, mediante un comunicado emitido vía redes sociales, señaló que entre las funciones asignadas a su cargo, no está contemplado el apoyo a fuerzas policiales o militares en materia de equipamiento de ningún tipo, por lo que durante su gestión al frente de esta representación diplomática nunca se dio una situación como como la referida por la Cancillería boliviana en las últimas horas.

“Dentro de las funciones como embajador no existe forma alguna de autorizar o enviar ningún tipo de asistencia las Fuerzas Armadas o policiales y mucho menos material de ninguna clase ya que los embajadores son representantes de países y no administra recursos militares, policiales o de otra índole”, expresó.

Sobre sus acciones durante la crisis política y social tras los comicios anulados de 2019, sostuvo que se abocó a prestar atención humanitaria y protección a los funcionarios de su delegación, a periodistas de su país y a funcionarios del gobierno de Morales que solicitaron asilo en esta representación diplomática.

Para ello, señaló que la única ayuda que recibieron de parte de su gobierno fue el arribo de efectivos de gendarmería argentina que llegaron para la protección de sus instalaciones y personal.

“Gendarmería llegó a Bolivia el 13 de noviembre para dar protección a los funcionarios de la Embajada, a los periodistas argentinos agredidos y a los funcionarios bolivianos asilados. Esta fue su misión, que cumplieron, permitiendo cuidara a todas las personas que estaban en riesgo de vida”, informó.

Sobre los exfuncionarios de que solicitaron asilo en esa representación diplomática, Álvarez informó que el exministro de gobierno Carlos Romero, la exdiputada Valeria Silva y su esposo; además, de la exministra Mariana Prado y otros exmiembros del Gobierno de Morales. Se facilitó la salida del país del esposo de la exministra Gabriela Montaño y otros dirigentes el MAS hasta la frontera con Perú.

Al respecto, la exministra de seguridad de argentina, Patricia Bullrich, manifestó que la única colaboración con el Gobierno boliviano fue el envío de gendarmes para la protección de las instalaciones de su embajada.

“Nosotros mandamos gendarmes para cuidar nuestra embajada, a los periodistas argentinos y a los miembros del gobierno de Evo que estaban asilados en nuestra embajada”, dijo.

En las últimas horas, el canciller del Estado, Rogelio Mayta, denunció que el Gobierno argentino envió material “bélico” para reprimir la protesta social en octubre y noviembre de 2019.

“Hemos tenido acceso a un documento que pone en evidencia que el gobierno de Mauricio Macri en 2019 aportó con equipamiento para que se pueda reprimir la protesta social para poder consolidar el gobierno que rompía el orden Constitucional”, manifestó Mayta.

La autoridad señaló que este documento fue recuperado de archivos informáticos. Y será enviado a la Fiscalía para que aporte en las investigaciones sobre el supuesto caso del golpe de Estado.