“Hemos acordado con vecinos y con el transporte de carga de esa zona, horarios específicos de circulación. Ellos (transporte de carga) no pueden entrar en día laborable en la mañana hasta las 9:00 tanto en el ingreso como de salida de Mallasa. Esta es una política regulada por la Guardia Municipal y ha tenido resultados importantes para que los vehículos, que transportan personas que van al trabajo y al colegio, puedan circular con cierta fluidez en una vía compleja”, explicó Villanueva.
El funcionario edil expuso que, en el marco del reordenamiento vehicular, en el mes de marzo se implementarán los controles en los vehículos de transporte de carga, transporte pesado y de construcción en otros sectores de la ciudad a fin de mejorar la fluidez vehicular y el tránsito peatonal.
En recientes días, el secretario anunció que el reordenamiento vehicular en su segunda fase empezará el 1 de marzo y se ampliará del centro paceño, donde se aplica desde el 5 de diciembre, a las zonas de Obrajes y Calacoto con restricción vehicular a vehículos públicos y privados, además del control al transporte de carga.
“Tenemos conversaciones adelantadas con los operadores de transporte (de carga) y lo que vamos a hacer es controlar a través de un permiso exclusivo y específico de acceso al centro de la ciudad para el transporte pesado. Habrá casos particulares y se analizarán de manera específica, pero en general creemos que esta política, además de otras que vendrán en el futuro va a permitir reordenar la ciudad y generar mejores condiciones de circulación, además de la propia convivencia de los vehículos con los peatones que en algún momento del día somos todos”, indicó.
Desde el 5 de diciembre de 2022, la comuna paceña implementa la primera fase del plan de reordenamiento vehicular que consiste en controles al estacionamiento irregular no permitido, el control de paradas de transporte y el uso de la señalización vial, además de otras infracciones como el trameaje y el incumplimiento de rutas.