Bloomberg News informó ayer que la administración del presidente Joe Biden está dispuesta a permitir que la exención expire el 25 de mayo, lo que podría acercar a Moscú al borde del impago.
“Se está considerando, pero no tengo una decisión que adelantar en este momento”, dijo el funcionario a Reuters. “Estamos estudiando todas las opciones para aumentar la presión sobre (el presidente ruso Vladimir) Putin”.
Bloomberg dijo que la administración ha decidido no ampliar la exención como forma de mantener la presión financiera sobre Moscú.
Las sanciones occidentales tras la invasión rusa de Ucrania prohíben las transacciones con el Ministerio de Finanzas, el Banco Central o el fondo nacional de riqueza de Rusia.
Sin embargo, una licencia general temporal 9A emitida por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro el 2 de marzo hace una excepción a efectos de “la recepción de pagos de intereses, dividendos o vencimientos en relación con la deuda o el capital”.
La licencia ha permitido a Moscú seguir pagando a los inversores y evitar el incumplimiento de su deuda pública, y ha permitido a los inversores estadounidenses seguir cobrando los cupones.
Expira el 25 de mayo, tras lo cual Rusia aún tendrá que realizar pagos de bonos soberanos externos por valor de casi 2.000 millones de dólares antes de que finalice el año.
Algunos agentes en el mercado habían especulado con la posibilidad de que Washington prorrogara la exención, para no castigar a los tenedores de bonos estadounidenses.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos no respondió inmediatamente a la solicitud de Reuters para hacer comentarios. (Reuters)