Algunos indígenas se declararon en estado de emergencia ante esta nueva arremetida de parte de la empresa estatal, luego de que en agosto reactivara este proyecto, convocando a empresas para la investigación geológica y geotécnica en la zona, pese al rechazo que viene desde el 2016.
Este fin de semana, representantes de la Red Eclesial de la Amazonía Boliviana (Repam Bolivia), la Coordinadora Nacional de Defensa de los Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas de Bolivia (Contiocap), Caritas, corregidores y organizaciones indígenas visitaron la zona para verificar la denuncia.
Una mujer indígena declaró que como Consejo Regional Chimán-Mosetén no tienen firmado ningún convenio con ENDE, pero la empresa “está entrando a nuestro territorio, nos está avasallando sin ninguna autorización” hace unas tres semanas.
“Si pusimos alambre de púa al río para defender nuestros recursos, volveremos a hacerlo para que ENDE no siga entrando como ladrón en la noche a nuestros territorios”, reclamó una mujer de la comunidad chimán a la periodista Mercedes Fernández para la red Erbol.
Lamentó que los pueblos indígenas no tengan recursos para que sus dirigentes puedan movilizarse para cuidar la zona donde vivirían alrededor de 17 comunidades. (Erbol)