Estos hechos delincuenciales que preocupa a la vecindad de estos barrios, ha dado lugar a que habitantes organizados tratan de contrarrestar el asedio de los antisociales que cada vez más se dan modos para asaltar y robar a los transeúntes muchas veces quitándoles la vida para robarles un celular u otro objeto de valor.
Por su parte, el municipio en los últimos días ha decidido implementar iluminación led en varias zonas, proyecto que abarcará a los 14 distritos municipales, pero no es suficiente según los vecinos de muchos barrios donde la delincuencia se ha incrementado a causa de la falta de control policial.
Asaltos y robos a mano armada, cuchillos, desarmadores y sogas para cogotear son utilizados por los antisociales para delinquir, donde la víctima si no quiere ser golpeada incluso perder la vida, no debe resistirse, pero en muchas de las oportunidades esto sucede, porque los afectados tratan de defenderse, por lo que hasta aparecen personas fallecidas en las calles a causa de la acción de los antisociales.
Redadas y operativos esporádicos realizados por la Policía han quedado completamente insuficiente al crecimiento de los grupos de antisociales que sin tener el menor reparo de quitarle la vida a una persona, por arrebatarle un celular u otro objeto de valor a su víctima, en muchas oportunidades les dejan abandonados y sin vida.
Vecinos de barrios como las zonas 12 de Octubre, Villa Dolores, Ciudad Satélite o 16 de Julio denunciaron que este problema con la presencia de grupos delincuenciales ha crecido de forma alarmante, sin que exista las patrullas policiales en hace mucho tiempo atrás se veía en las calles.
Otro de los problemas que fueron denunciados por los habitantes de estos barrios considerados zonas rojas son la proliferación de bares clandestinos que tienen como clientes a estas personas del mal vivir, donde luego de cometer sus fechorías acuden a estos lugares para repartirse lo robado, donde en muchas ocasiones son depositados en estos antros como prenda para seguir consumiendo bebidas alcohólicas.
Muy pocas fueron las oportunidades en que la Policía, en los pocos operativos realizados, arrestó a los dueños de estos bares, como cómplices de estos grupos delincuenciales, a pesar de conocer la ilegalidad del negocio, los cuales no cuentan con licencia de funcionamiento y expenden licores de dudosa procedencia.