“Este Protocolo de Protección y Prevención contra el covid-19 contempla restricciones para bailarines, espectadores y comerciantes; fue aprobado por la Secretaría Municipal de Salud. Los ‘Fiscales por la Vida’ con el apoyo de funcionarios municipales harán cumplir esta disposición”, informó el secretario municipal de Culturas y Turismo, Rodney Miranda.
El Comité de Operaciones de Emergencia Municipal (COEM) autorizó el 3 de febrero las actividades del Carnaval Paceño bajo estrictas medidas de bioseguridad. En esa oportunidad se anunció la elaboración de un protocolo.
Los menores de 18 años no pueden participar en la entrada del Jisk’a Anata del lunes 28 de febrero. Los bailarines deben portar el carnet de vacunación contra el covid-19 a la vista, será controlado a través del escaneo del código QR.
Se estableció el distanciamiento físico de un metro entre bailarines, evitar el intercambio de objetos, se restringió el consumo de bebidas alcohólicas antes, durante y después del recorrido, quienes no acaten estas disposiciones serán desalojados por efectivos de la Guardia Municipal.
Recalcó que para los espectadores se dispuso el uso de las medidas de bioseguridad, está prohibido el manejo de espumas, serpentina en aerosol porque se considera como un canal de contagio de coronavirus.
Se habilitarán seis puntos de ingreso y salida: Av. Ismael Montes, a la altura de la calle Ingavi, esquina Sagárnaga y Mariscal Santa Cruz, Ayacucho, Loayza y Bueno, informó AMUN.
En el ingreso a graderías se controlará el carnet de vacunación, distanciamiento de un metro de silla a silla (tanto hacia los costados como de arriba y hacia abajo). Los dueños de las graderías deben contar con señalética que informe al usuario sobre la separación.