“¿No es una crueldad tomar un animal, intervenirlo quirúrgicamente y volverlo a tirar a la calle? Todo por aparentar que se está cumpliendo una promesa”, cuestionó la organización animalista en una publicación en su cuenta oficial de redes sociales.
La campaña fue inaugurada el pasado 18 de abril anunciando que se capturará a los canes de las calles con la ayuda de la Policía Forestal y de Protección al Medio Ambiente (Pofoma), de organizaciones animalistas y vecinos de las distintas zonas para trasladarlos a instalaciones de la Casa de la Mascota, realizar las cirugías y atenderlos por 10 días.
También se informó que, una vez pasado ese tiempo, los canes serían devueltos a las calles por tratarse de “perros comunitarios” que reciben alimentación y cuidados de los vecinos de las zonas donde fueron capturados. Animales SOS rechazó esta afirmación y argumentó que los canes en las calles están expuestos a todos los riesgos y terminan muertos, atropellados o envenenados. “¡¡Con todo respeto, no estamos de acuerdo!!”
La organización animalista que tiene actividades constantes de vacunación y esterilización de mascotas a precios económicos en su propia veterinaria explicó que, al estar expuestos a los peligros de las calles, los perritos esterilizados incluso tienen una corta vida menor a dos años, por lo que la campaña “es insulsa” debido a que “desperdiciará recursos”.
Por ello, Animales SOS informó que si se trata de invertir en esterilizaciones se debe “poner prioridades”, que la prioridad deben ser hembras con propietarios responsables, pero de escasos recursos, que nunca podrían acceder a una cirugía de esterilización mayor a 70 bolivianos, reportó ANF.
Tras dos días de campaña en Mallasa, el programa Mascota Protegida informó que se realizaron 82 esterilizaciones, aunque entre ellas también se operaron a mascotas con dueños, que pagaron un monto bajo.