Comunarios de Azariama denuncian que la Cooperativa Minera Aurífera Azariama Colorado R.L. y consejeros de la Federación de Cooperativas Mineras Auríferas, Ferreco R.L., y las empresas Syngard S.R.L y Huasiquibol S.R.L están acaparando más de 200 cuadriculas para la explotación de oro a lo largo del río Tuichi.
Los comunarios llegaron a la oficina de la ANF para mostrar documentos de cómo los socios de la Cooperativa Aurífera Colorado están tramitando dos áreas de explotación en la zona, a la vez algunos de los asociados de esta cooperativa también tramitan otras tres áreas a través de las empresas como Syngard y Husaquibol.
Ambos voceros pidieron guardar en reserva sus nombres por seguridad, toda vez que las pugnas por el oro, en otras comunidades de Apolo, ha desatado conflictos y enfrentamientos incluso armados.
“Que los asociados (as) de la Cooperativa Aurífera Colorado y consejeros de la Federación de Cooperativas Mineras Auríferas (Ferreco R.L) desde 2017 hasta la fecha, vienen acaparando indiscriminadamente áreas mineras dentro de nuestra jurisdicción Comunidad Azariama”, dice la denuncia pública.
Su denuncia se asienta en la información oficial de la Dirección de Catastro y Cuadriculado Minero de la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM), que establece que la Cooperativa Minera Aurífera Azariama tramita dos áreas 69 cuadrículas en un sector y 75 en otro sector, en total 144 cuadrículas.
Sin embargo, asociados de esa cooperativa, de acuerdo a los testimonios de constitución de la sociedad de responsabilidad limitada, y consejeros de la Federación Regional de Cooperativas Mineras “Ferreco R.L.”, “realizan y tramitan para su beneficio propio tres áreas mineras más dentro de nuestra comunidad Azariama”.
Según los documentos se trata de la empresa Syngard S.R.L. que gestiona 36 cuadrículas, Husaquibol tramita en un sector un área de 18 cuadrículas y en otro sector la misma empresa otras 18 cuadrículas.
Se trata de 216 cuadrículas en total equivalente a 5.600 hectáreas de territorio dentro de la jurisdicción de Azariama insisten los comunarios. Detallaron que entre las gestiones 2013 y 2014 realizaron la rezonificación para beneficiar con áreas de cultivo a los habitantes, sin embargo, terminó beneficiando a los mineros.
Los comunarios relataron a esta agencia que al menos 50 familias fueron engañadas por la cooperativa, toda vez que consiguieron que la consulta previa salga a su favor prometiendo a los pobladores que se convertirían en socios, sin embargo, esta promesa fue incumplida.
La mayor preocupación es que un grupo de personas que son asociados de la cooperativa también son parte de las empresas y a través de diferentes figuras están “loteando” todo ese territorio; protestan porque de la explotación las comunidades no tienen compensación y solo la destrucción de la zona, además de contaminar el río con mercurio.
Develaron que existe un tráfico de las áreas de explotación, porque después de lograr las autorizaciones estas áreas son entregadas a las empresas que son las que invierten en la extracción del oro.
De acuerdo a la documentación, que los comunarios mostraron, por ejemplo, Saúl Gonsaga que es comunario de Azariama, aparece como socio de la Cooperativa Minera Azariama, pero también está registrado como socio en la empresa minera Husaquibol.
Pero también aparecen en estas actividades gente que no pertenece a la comunidad, es el caso de Edgar Mallo que es socio de la cooperativa y aparece en la misma empresa Husaquibol; Gary Salinas que es socio de la cooperativa y aparece en la empresa Syngard.
La comunidad de Azariama ha solicitado la nulidad de las autorizaciones de explotación, tanto el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap) anuló el certificado de compatibilidad de uso, tras la denuncia que realizaron. La misma decisión habría asumido la AJAM.
Por otra parte, rechazaron la pausa ecológica que había planteado la senadora Cecilia Requena y solicitaron el apersonamiento para ser parte de la audiencia de acción popular. (ANF)