“Está oficialmente confirmado de que el 1 de febrero empecemos las labores educativas de la gestión 2022, tomando en cuenta, por eso, el comportamiento de la epidemia en cada uno de los contextos donde están nuestras unidades educativas”, sostuvo Pary en Unitel.
Añadió que el deseo para el 2022 es empezar las clases presenciales y para ello se trabaja con las autoridades de los gobiernos subnacionales, especialmente con las autoridades de los municipios para que acondicionen las infraestructuras de los colegios en el tema de medidas de bioseguridad, servicios higiénicos y todos los aspectos que pueden influir en el tema del control de la pandemia.
Acotó que uno de los aspectos importantes para el retorno a las clases presenciales es el tema de la vacunación, pero no solamente de los estudiantes y maestros, sino de la población en general ya que los focos de infección no solamente están en los colegios, sino también están en los sitios donde existe aglomeración de personas.
“Llamamos a la reflexión a la sociedad entera, padres y madres de familia quienes hasta ahora no se han vacunado y ahora lo pueden hacer porque de alguna manera de eso va depender el éxito o fracaso (del retorno a las clases presenciales)”, expresó Pary.
En una breve evaluación sobre el funcionamiento de las tres modalidades de educación, Pary sostuvo que en todos los aspectos la educación funciona porque el docente evalúa al estudiante en base al aprendizaje en las aulas y es en el mismo lugar donde se realiza el apoyo si algún estudiante presenta alguna debilidad.
Asimismo, manifestó que una vez que concluyan con los trámites de la gestión 2021, recién se conocerán los aciertos y desaciertos en el tema de la educación como el tema de la deserción y los aplazados, reportó ANF.
Desde que la pandemia ingresó a Bolivia en marzo del 2020, la educación en Bolivia tropezó con varios problemas por ejemplo en el momento de migrar hacia las clases virtuales hubo dificultades en el acceso a internet, al respecto el Ministro de Educación manifestó que la responsabilidad no solamente es del nivel central, sino también de los gobiernos subnacionales.