Cada 11 de enero, en Bolivia se celebra el Día Internacional del Acullico que consiste en el masticado de la hoja de coca como la reafirmación de una tradición ancestral y con fines de mantener energía en el organismo para la faena.

Hoy ya no solo se acullica. Es decir, no solo se mastica. Ahora, los consumidores se dedican a absorber una especie de pastillas de coca machucada. Los yatiris lo llaman el acullicu moderno.

Es una manera diferente de pijchear la hoja milenaria.

Los transportistas y comerciantes son quienes en su mayoría la consumen. Juan Carlos Ballón, representante del Consejo Nacional de Amautas, indicó que el consumo de coca machucada tomó más fuerza en el oriente, aunque en el occidente también. Diferentes estudios coinciden que en Santa Cruz los pedidos de “la machucada” son altos. Solo así se puede explicar que una mujer conocida fue elegida Miss Coca Machucada, publicó Urgente.bo.

Si bien no es correcto, eso no quiere decir que no se deba hacerlo, añade. Sin embargo explicó que el verdadero acullico tiene un significado muy andino, en el que los aymaras se reúnen para compartir y se lo hace con coca dulce y natural, la hoja que se produce en los Yungas de La Paz.

“Ahora en el oriente la coca se combina con bicarbonato, con otros endulzantes, ya es una costumbre, muchos de los hermanos optan por esta forma de acullico, es un acullico moderno, se ha modernizado, a la coca la machucan y hasta el sabor es distinto”, explicó el yatiri a El Compadre.

Según Ballón, consumir coca machucada se convierte en costumbre y gana más consumidores en La Paz, Cochabamba, Oruro y Santa Cruz. A su vez, el amauta afirmó que el consumo de la coca machucada será tratado en los congresos que lleven en adelante.

“Los clientes que compran la coca machucada son jóvenes, obreros, taxistas, trasportistas, amas de casa y el público en general. En el norte de Santa Cruz se volvió normal que todos estén boleando con la coca machucada. Todos aquí compran, todos bolean, obreros, taxistas, trasportistas, jóvenes”, acotó la comerciante Vilma.

En La Paz la coca machucada no es muy conocida, pero tiene su clientela, dice Flora Vargas, que tienen un puesto en la zona Miraflores. Ella dice que las bolsas están hechas para todo estatus social, pero en su mayoría compran comerciantes y transportistas que tienen largas jornadas laborales.

“Los choferes me compran más, ellos trabajan en la noche y se llevan sus bolsitas. Es parte del acullico nomás, solo que más agradable para el gusto del que lo consume”, indicó.

A diferencia de Santa Cruz, la comerciante señaló que en La Paz, los precios son un poco más económicos, se puede conseguir bolitas desde los Bs 5 hasta los Bs 50.

“Son hojas escogidas, no se machuca las hojas dañadas, damos al cliente lo mejor”, subraya la vendedora.