El comandante del Batallón de Seguridad Física de la urbe alteña, coronel Wilson Flores, detalló que en el local fueron encontradas personas durmiendo en los sillones, las bebidas eran adulteradas y no tenían el registro sanitario, el establecimiento tampoco tenía licencia de funcionamiento, señala una nota de la red Erbol.
“Hay una puerta principal donde ingresan, otra ruta por donde vigilan y puedan escapar; y otra atrás, donde hay unas gradas que directamente conduce a un baño público”, explicó el jefe policial.
De las 50 personas arrestadas 30 son varones y 20 mujeres. La mayoría son jóvenes y fueron conducidos hasta dependencias policiales con fines investigativos para establecer su identidad y antecedentes.
En el mismo inmueble donde fue descubierto el bar clandestino había un alojamiento y un restaurante. “Es un cementerio de elefantes, donde toman y no salen de acá”, añadió Flores.
La Intendencia se encargó de decomisar todos los muebles y bebidas alcohólicas.