Diversas voces, entre usuarios y sectores sociales, criticaron el deficiente servicio porque en muchas rutas -según los pasajeros- redujeron la cantidad de vehículos y aumentó el tiempo de espera.
El gerente general del Servicio de Transporte Municipal (Setram), René Chávez, reconoció que la frecuencia del servicio disminuyó en comparación con gestiones anteriores, principalmente del 2019.
“La operación cotidiana (del servicio) utiliza alrededor de 100 buses, a veces un poco menos a veces un poco más”, aseveró el gerente en entrevista con la Agencia Boliviana de Información (ABI).
Algunos pasajeros de las zonas de Achumani y Pura Pura reclamaron y dijeron que el servicio es muy extrañado ya que ahora varía mucho en sus horarios, por lo que optan por usar minibuses, que solo cubren la ruta por tramos.
Ante esta situación, Chávez explicó que la reducción de los buses se debe a que entre el 10 % y el 20 % de ellos deben ingresar a un mantenimiento diario de prevención. Otro 10 % está en espera, y salen en caso de que algún vehículo presente alguna dificultad.
“Efectivamente no hemos alcanzado los niveles del 2019, estamos en un 80 por ciento de lo que se tenía antes, (pero) poco a poco vamos a recuperar los niveles que se tenían”, acotó.
Sobre los nuevos buses PumaKatari que están varados en el Parque Urbano Central y cumplieron dos meses sin prestar servicio, explicó que durante el primer mes se realizó una revisión técnica para hacer la recepción definitiva; sin embargo, ahora pasan por un trámite y no quiso dar una fecha probable para su próximo funcionamiento, argumentando que sería una sorpresa.
“El primer mes ha tenido el periodo de revisión técnica para recibir los buses como tal, ese proceso ya se ha terminado. Ahora (esos 66 buses) están en un trámite administrativo para que entren a propiedad del Gobierno Municipal”, indicó. De momento, los buses permanecen a la intemperie y sin ninguna utilidad.