La preocupación de los vecinos de muchas zonas afectadas, por la presencia de antisociales en sus calles, es que no pueden hacer mucho para contrarrestar el asedio de la delincuencia, debido a los riesgos de venganza que generan estas personas, quienes portan armas de fuego y, en muchos casos, no dudan en utilizar en contra de los vecinos.
Por otro lado, el anuncio por parte de las autoridades de gobierno sobre el incremento de efectivos policiales para el patrullaje en estos barrios, no ha generado mucha expectativa, porque todavía es insuficiente para una población de más de un millón de habitantes que tiene esta urbe, conformada en 14 distrito municipales.
Vecinos de los barrios como Ciudad Satélite, 16 de Julio, Alto Lima, Rio Seco, Villa Adela, entre otros decidieron implementar algunos defensivos como el cierre de sus calles con cadenas en diferentes horarios para que vehículos sospechosos no ingresen a estos lugares.
Por otro lado, el colocado de muñecos en los postes de las esquinas se han incrementado con la advertencia de: “ladrón capturado será linchado”, y con otro tipo de escrituras, los mismos que son colgados como parte de la defensa que decidieron efectuar entre vecinos.
De la misma forma, no quedaron fuera de estos acuerdos de cómo defenderse de los antisociales, los pitos y petardos, además de las alarmas vecinales en algunos casos, donde a sola presencia de alguna persona sospechosa o la captura de algún delincuente hacen sonar los pitos y hacen reventar los petardos. De inmediato los vecinos acuden en auxilio de los afectados.
Sin embargo, el miedo de ser atacados por los delincuentes, quienes en muchos de los casos portan armas de fuego es un riesgo que constantemente está latente, pero la decisión de defender su propiedad también da lugar a correr este riesgo, como en el último caso que se ha generado en un barrio de La Paz, donde dos vecinos fueron acribillados a balazos por defender sus casas.