El director del Programa Ampliado de Inmunización (PAI), Max Enríquez, informó que se desecharon aproximadamente de 800.000 a un millón de dosis de vacuna anticovid. La autoridad llamó a la población a acudir a los puntos de inmunización.
“Estaríamos entre 800.000 a un millón de dosis (que se perdieron)”, afirmó en entrevista con radio Compañera y explicó que no se tiene el dato exacto, pero mencionó que el factor de pérdida permitido es del 10 %.
“Lo que tenemos es un factor de pérdida establecido para el país del 10 %, estaríamos dentro de este parámetro, estamos al 50 % más o menos, estamos recolectando datos porque han sido distribuidos a todos los establecimientos donde hay vacunatorios que son más de 3.000”, añadió.
Según Enríquez, la vacuna Sinopharm tiene una vigencia de por lo menos dos años, mientras que el resto, de ocho meses a un año.
Detalló que hasta la fecha el 71.8 % de personas mayores a 18 años tiene la primera dosis, con la segunda se alcanzó a más del 61 %, y se busca llegar por lo menos al 70 %. Explicó que aún faltaría el 15 % de vacunados para una población totalmente protegida, por ello, llamó a recibir la tercera y la cuarta dosis.
“Lo que también tenemos que informar es que el esquema completo no solo en Bolivia, sino en todos los países ya se habla en tres dosis como esquema completo y ya no dos, tenemos que ir promoviendo a que la población con dos dosis recurra a su tercera y en algunos casos hasta a una cuarta dosis”, dijo.
Desde la oposición se cuestionó estas cifras, indicando que es el resultado de la falta de campañas de información para la población y por aplicar medidas de carácter político antes que determinaciones basadas en aspectos técnico sanitarios.
El diputado por Comunidad Ciudadana, Ingvar Ellefsen, recordó que antes del retorno al poder del MAS, existieron campañas de desinformación sobre el beneficio de las vacunas, todo con la finalidad de alimentar un escenario de desestabilización al gobierno transitorio. “Ellos atacaban a las vacunas”, sostuvo.
Señaló que esta desinformación afectó al proceso de vacunación ya que “al asumir el Gobierno y al tomar la responsabilidad de estar a cargo de la vacunación, tenían ideologizadas a las personas y con una posición contraria”, dijo.
Ellefsen también calificó a las campañas de información y vacunación como insuficientes, al no lograr la debida recepción en la ciudadanía. Hecho que podría considerarse “una malversación de fondos de las autoridades”.
Apuntó al retroceso gubernamental en la medida de exigir el carnet de vacunación como una de las causas del bajo interés de la población para acceder a una dosis contra el coronavirus. “Exigen o dejan de exigir por cálculo político y no por la salud de la gente y es un error el hacer política con el tema”, cuestionó señalando que es preciso erradicar de una vez la enfermedad. (EL DIARIO y Urgentebo)