El viceministro de Desarrollo Rural, Álvaro Mollinedo, detalló que la sequía también afectó a 200.000 hectáreas (ha) de cultivos, de las cuales cerca de 20.000 ha fueron dadas por perdidas. Además, de la muerte de cerca de un millón de cabezas de ganados, entre bovino, porcino, camélidos y ovino.
Por ello, el Gobierno activó el Plan Plurinacional de Respuesta Inmediata a la Sequía, mediante el cual dotó a las familias afectadas tanques de almacenamiento de agua y adquirió cisternas de modo que no falte el líquido vital.
“Hemos alcanzado ya a más de 150 municipios que han sido afectados”, sostuvo Mollinedo, a tiempo de detallar que, mediante este plan nacional, se atendió a unas 23.000 familias productoras no sólo con la dotación de agua, sino también con semillas, abonos, fertilizantes y otros insumos.
Al respecto, los ministerios de Desarrollo Rural y Tierras y de Medio Ambiente y Agua trabajan en los proyectos de preinversión para el aprovechamiento de agua de las cordilleras y de este modo hacer frente a la sequía.
Con ello, la finalidad es tener grandes represas, atajados y trasvases de agua que se conecten con las zonas de producción para ya no depender de las lluvias, según datos del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras.