Tras registrarse movimientos telúricos en países vecinos y sentirlos en algunas regiones bolivianas, el presidente de la Sociedad de Ingenieros de Bolivia (SIB) La Paz, Raúl Daza, indicó que la ciudad de La Paz no está exenta de amenazas sísmicas y anunció que se realizará un relevamiento de las edificaciones que no cuenten con un diseño sismo resistente.
“Hay que hacer una evaluación estructural (…) y en coordinación con el Gobierno municipal se va a hacer un relevamiento de las edificaciones que no tengan un diseño sismo resistente y claro que en Ingeniería sí se puede reforzar las estructuras, es por eso que tanto para estructuras antiguas como nuevas se va establecer un protocolo un mecanismo de control para seguridad de todos”, indicó el experto.
Asimismo, las construcciones nuevas deberán solicitar una certificación que garantice que cuentan con un diseño sismo resistente.
“Que vengan a la Sociedad de Ingenieros y que certifique que su construcción va a tener este marco normativo de diseño sismo resistente”, sostuvo Daza, a tiempo de reiterar que todas las edificaciones de la urbe paceña deberían contar con ese documento.
El presidente de la SIB reconoció que reforzar las estructuras o construirlas sismo resistentes demanda mayor inversión económica, pero “la seguridad y la vida no tiene precio”.
“Es verdad que reforzar las estructuras o hacer un diseño sismo resistente incrementa el costo de la edificación, pero no incrementa mayor a 10 por ciento, máximo 15 por ciento dependiendo a la magnitud de la infraestructura”, manifestó.
Por su parte, la Alcaldía de La Paz trabaja un protocolo para aplicar la ley nacional referida a la construcción de edificios antisísmicos ante la probabilidad de que ocurra este fenómeno en el municipio. Este lineamiento estará destinado a exigir que las futuras edificaciones cumplan este requisito.
“Estamos trabajando en un lineamiento, una especie de protocolo para aplicar la ley nacional que está vigente desde noviembre del año pasado. Nosotros tenemos que cumplir esa normativa, estamos elaborando unos lineamientos, un protocolo de aplicación, y a todos los futuros permisos de construcción les vamos a exigir ese tipo de características”, explicó la secretaria Municipal de Planificación de La Paz, María del Carmen Rocabado.
La Resolución Ministerial 271 del 27 de noviembre de 2023 establece la aprobación de la Norma Boliviana de Diseño Sísmico orientada a este fin. La secretaria edil aseguró que la comuna dialoga con el Colegio de Arquitectos y con el sector de la construcción para cumplir este propósito a futuro, aunque esto conlleve cierto perjuicio dado que las edificaciones antisísmicas suben un 10% el costo de construcción.
Ante la consulta de qué va a ocurrir con los edificios ya construidos que no cumplen con esta característica, la autoridad edil aseguró que deberán aplicar un “refuerzo antisísmico” a sus estructuras.
“Nosotros lo que pensamos es que hay que hacer un análisis del suelo donde están construidos y si son mayores a las cinco o seis plantas, hay que tener un refuerzo en las columnas. Y eso se tiene que hacer en trabajo estrecho con la Cadeco (Cámara Departamental de la Construcción), con la Caboco (Cámara Boliviana de la Construcción), con la Sociedad de Ingenieros de Bolivia, con todos los constructores también, para ver en qué magnitud puede haber el daño, porque eso es lo que se tiene que calcular. Eso es un cálculo estructural y eso tenemos que trabajar”, puntualizó Rocabado.