Las filas de personas que se forman fuera de los diferentes hospitales en busca de atención médica continúa siendo un problema en gran parte del país, así se refleja en el Hospital del Niño “Manuel Asencio Villarroel” en Cochabamba.
Los padres tienen que esperar por largas horas y hasta pasar la noche en la intemperie, soportando el frío y la lluvia para así poder guardar un puesto, muchos de ellos, incluso acompañados de sus hijos.
Desde el Hospital del Niño, también conocido como “Pediátrico” se afirma que esta situación se debe a diferentes factores entre los que se encuentra la alta demanda de pacientes en busca de atención de los servicios especializados.
Sin embargo, pese a que este nosocomio tiene varias especialidades, éstas no siempre cuentan con un espacio apropiado para la atención, ya que en muchos casos los médicos se ven obligados a compartir consultorios para poder atender a los pacientes.
Según el director de hospital, Raúl Copana, algunos médicos tienen horarios establecidos y deben limitar la cantidad de fichas de atención, para poder dejar libre el consultorio y así otro especialista pueda ocuparlo.
“La estructura insuficiente que nos obliga a restringir los horarios de atención de nuestros especialistas en vista que nuestros consultorios son escasos, tienen que servir para todos”, informó.
Hasta que no se encuentre una solución, las filas en el “Pediátrico” y los otros hospitales del departamento y el resto del país continuarán. (Cochabamba, con datos de Unitel)