La ciudad de Cochabamba vivió ayer una jornada inolvidable con la Entrada Universitaria, un evento que reunió a 76 fraternidades en una celebración de la cultura y el folklore boliviano.
Desde las primeras horas de la mañana, las calles de la ciudad se llenaron de color, música y alegría, mientras centenares de bailarines se preparaban para exhibir sus mejores coreografías.
La entrada desde el inicio tuvo un ambiente festivo que envolvió a todos los asistentes. Las fraternidades, cada una representando diferentes danzas tradicionales, ofrecieron un espectáculo deslumbrante que capturó la esencia de la diversidad cultural de Bolivia.
Los estudiantes universitarios mostraron pasión por mantener vivas las tradiciones culturales del país. A lo largo del recorrido, que abarcó varias calles emblemáticas de Cochabamba, el público se congregó para disfrutar de las actuaciones. Familias, estudiantes y turistas se unieron para celebrar, creando un ambiente de camaradería y orgullo cultural. Los trajes elaborados y los ritmos contagiosos hicieron que la jornada fuera una experiencia inolvidable para todos.
El ejecutivo de la Federación Universitaria Local (FUL), Ibis Ugarte, destacó la importancia del cumplimiento de los roles de ingreso y horarios establecidos. Gracias a una organización meticulosa, el evento se desarrolló sin contratiempos. Ugarte había advertido previamente sobre las sanciones para quienes no respetaran las normativas, lo que contribuyó a mantener el orden y la seguridad durante toda la celebración.
La Entrada Universitaria no solo fue una muestra del talento artístico de los estudiantes, sino también una reafirmación del compromiso con la cultura boliviana, consolidándose así como un evento emblemático que une a generaciones en torno a la danza y el folklore boliviano. (Cochabamba, EL DIARIO)