Un recorrido que realizó EL DIARIO por las ferias, se advirtió que mientras las horas avanzan, mayor cantidad de gente se da cita en esos lugares. En La Paz, se determinó el cierre de la avenida Baptista, desde la altura de la puerta del Cementerio General pasando por la avenida Tumusla, parte de la Buenos Aires e Illampu, además de la calle Calatayud. Similar cierre se realizará la próxima semana, antes de Año Nuevo.
El comercio se ha apoderado de las calles y para muchos “esto es Navidad, cada año es lo mismo venir a buscar el regalo para la familia, sobre todo, los hijos y te encuentras con calles y ferias repletas de comerciantes y gente que quiere hacer sus compras (…), pero después de ser empujado y empujar, cuando llegas con lo que buscabas y se lo entregas a tu ser querido, es una sensación de felicidad que bien vale la pena”, reflexionó el señor Carlos mientras recorría por la tradicional feria de la Huyustus, en la urbe paceña.
Como él miles de personas buscan regalos, alimentos o lo necesario para pasar una Nochebuena feliz y en familia, pero a muchos se les olvida que “los dueños de lo ajeno” también están al acecho y pese al resguardo policial, los pillos se dan modos para cometer sus fechorías, por ello, la Policía recomendó tener mucho cuidado con el dinero que porta y los artículos que adquiere.
Asimismo, de preferencia no llevar niños a esos lugares, pero en caso de hacerlo, tener cuidado con ellos y estar pendientes para evitar extravíos.
Además de la adquisición de productos materiales, las compras navideñas para el preparado del plato tradicional: la picana, también es importante. Por eso, cientos de personas visitan distintos mercados para abastecerse de diferentes productos y alimentos típicos.
El mercado Rodríguez, el de Villa Fátima, del Cementerio, además de la zona 12 de Octubre, en El Alto, son los principales centros de abasto y se evidenció la intensa actividad que hay en ellos, donde la gente compra carnes de pollo, cerdo, res e incluso, cordero, además de verduras.
Similar situación se vive en las ferias y mercados de los demás departamentos del país, donde se llenan de personas que buscan los regalos para sus seres queridos o van a comprar los alimentos para preparar una rica cena navideña, aunque muchos otros no podrán hacer ninguna de esas cosas, por diferentes motivos, pero sí reconocen que Navidad es un día para celebrar en familia.
Los pasillos están abarrotados de personas que buscan encontrar el regalo perfecto y los ingredientes esenciales para la cena navideña.