El Comando Estratégico Operacional de Lucha Contra el Contrabando (CEO-LCC) intensificó los controles en desaguadero, de acuerdo al viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Luis Amílcar Velásquez Burgoa.
“Nos encontramos en el punto del río donde hace semanas atrás había mucho contrabando a la inversa, ahora el día de hoy (ayer) pueden observar que ya no hay ningún movimiento, hemos ejecutado el plan soberanía en coordinación con las Fuerzas Armadas con el brazo operativo del CEO-LCC, estamos junto al comandante verificando estas actividades”, señaló a los periodistas.
Mencionó que en el marco del plan soberanía, sólo en dos semanas en la línea del desaguadero frontera Bolivia – Perú se está frenando el contrabando a la inversa con la militarización en fronteras, ya que se obtuvo resultados producto del trabajo de los efectivos de lucha contra el contrabando que comisaron: 400.000 unidades de huevo, aproximadamente 1.400 quintales de arroz, 70 quintales de quinua, 250 quintales de azúcar y 6.000 litros de aceite.
En el sector de Desaguadero, Bolivia-Perú, dijo, se ejecutan controles para impedir la salida de alimentos y productos de primera necesidad. El Gobierno garantiza la seguridad alimentaria.
Por su parte, el comandante del CEO, Félix Sandro Gutiérrez, sostuvo que se ha desplegado en todo el territorio nacional a los comandos estratégicos de operación para garantizar la seguridad alimentaria.
Para los economistas, el invento del Gobierno de contrabando a la inversa no es otra cosa que exportación, como se lo llama en otros países, pero ante la falta de producción nacional y una mejor oferta de precios en mercados vecinos, los bolivianos y productores prefieren enviar al exterior, por el control de precios que realizan las autoridades.