Señalan que el anuncio de un nuevo referéndum para definir temas como la reelección, escaños y la subvención del combustible, demuestra que la actual administración busca “lavarse las manos” en temas sensibles para la población.
> Recuerdan que en la gestión 2004 (gobierno de Carlos Mesa), mediante un referendo de similares características, se consultó a la población temas de política hidrocarburífera como la exportación de recursos gasíferos.
> Reiteran pedido para que se elimine la figura de los parlamentarios suplentes a partir de la legislatura 2025-2030.

Sumándose a los criterios que cuestionan al actual Gobierno por negarse a asumir “decisiones impopulares” en temas sensibles como la subvención a los hidrocarburos, el diputado por Comunidad Ciudadana (CC), Óscar Balderas, criticó la posición asumida por políticos opositores como Carlos Mesa, recordando que el exmandatario, en 2004, dispuso consultar a la ciudadanía temas como la nacionalización o exportación de gas vía puertos chilenos.
En recientes declaraciones a medios de prensa en la Sede de Gobierno, el parlamentario beniano sostuvo que el anuncio de un nuevo referéndum para definir temas como la reelección, escaños y la subvención del combustible en territorio nacional, demuestra que la actual administración busca “lavarse las manos” en temas sensibles para la población, todo debido a una evidente incapacidad para asumir medidas en estos aspectos.
“Sobre la subvención a los hidrocarburos, el Gobierno actual no se atreve a tomar decisiones impopulares y pasa la pelota al pueblo, igual que hace 20 años”, manifestó el parlamentario.
En ese contexto, Balderas cuestionó que algunos líderes de oposición como el expresidente Carlos Mesa, hayan expresado un firme rechazo a la propuesta del actual Gobierno, tomando en cuenta que en la gestión 2004 (gobierno de Mesa), mediante un referendo de similares características, se consultó a la población temas de política hidrocarburífera como la exportación de recursos gasíferos.
“Recordar a la población que el Gobierno de Mesa, se lavó las manos y convocó a referéndum para que la ciudadanía decida que el gas boliviano debía ser nacionalizado y no exportado a Estados Unidos por puertos chilenos, como tenía pensado inicialmente el Gobierno de Sánchez de Lozada, del cual Mesa era parte”, recordó.
Sobre las otras dos consultas planteadas por el presidente Arce para ser definidas vía referéndum, el legislador beniano sostuvo que el tema de la reelección ya se encuentra establecido en el artículo 168 de la Constitución Política del Estado (CPE) y está plenamente vigente, pese al intento de Evo Morales, en 2016, para forzar una modificación que lo habilite a postular a la presidencia de forma indefinida.
“El 21 de febrero de 2016, querían modificar la CPE para eternizarse en el poder. Pese a perder dicho referéndum, Morales no respetó la voluntad popular, en 2019 se postuló por cuarta vez y cometió un escandaloso fraude”, apuntó.
Finalmente, señaló que consultar sobre la posible modificación de los escaños en la Asamblea Legislativa, compuesta por 36 senadores y 130 diputados, es otro grave error de la actual administración, tomando en cuenta que el mecanismo de asignación y reasignación de escaños parlamentarios por departamento ya se encuentra claramente definido en la Carta Magna y en la norma electoral vigente. Asimismo, reiteró su pedido para que se elimine la figura de los parlamentarios suplentes a partir de la legislatura 2025-2030.
El pasado 6 de agosto, durante su mensaje por los 199 años de la independencia de Bolivia, el presidente Luis Arce Catacora, planteó que sea la ciudadanía la que defina, mediante referéndum, temas como la reelección presidencial, la subvención de combustibles y la distribución de escaños legislativos.
“Momentos difíciles requieren de decisiones firmes, maduras, reflexionadas y de seres humanos que no desfallezcan ante las adversidades, y este es precisamente un momento de esta naturaleza. Por tal motivo, con el pueblo y por vías democráticas, convoco a un referéndum en la fecha en la que se desarrollen las Elecciones Judiciales”, planteó Arce, argumentando que se quiere evitar que los temas en cuestión “sean utilizados como instrumento político de confrontación entre bolivianos”.
El anuncio fue cuestionado por líderes de oposición, entre ellos Carlos Mesa, quien mediante sus redes sociales, aseguró que Arce busca eludir su responsabilidad de asumir decisiones para afrontar la actual crisis económica por la que atraviesa el país.
“Trata de escapar a la responsabilidad de asumir decisiones a la grave crisis económica que afecta a los ciudadanos, a los que pretende transferir sus obligaciones”, sostuvo Mesa, agregando que, en la actualidad, el país paga las facturas de pasadas malas gestiones en el tema hidrocarburos.
Desde la alianza Comunidad Ciudadana, se emitió un comunicado con la posición de esta organización política, en esta se cuestiona que el presidente Luis Arce, nuevamente “oculte la cabeza a la realidad” recurriendo a “una nueva cortina de humo”, cuyo único objetivo es evadir responsabilidades y deberes.
“Cuando el pueblo boliviano ve día a día sus bolsillos más vacíos, Arce pretende plantear una pregunta sobre la subvención a los hidrocarburos en un referendo que, en el mejor de los casos, se realizará en diciembre, como si la crisis económica y la falta de carburantes no estuviera ya encima de nosotros hoy”, señala parte de la nota.
El documento también observa que se mezclan temas constitucionales con temas y procedimientos ordinarios y se postergan decisiones urgentes de manera “irresponsable”.
Los cuestionamientos del diputado Balderas tienen que ver con que, en 2003, tras la renuncia de Gonzalo Sánchez de Lozada, Mesa, se comprometió a llamar a un referéndum vinculante sobre el tema gas.
Luego de aprobarse reformas a la Constitución Política del Estado en febrero del 2004, se introdujo la figura del referéndum y la Asamblea Constituyente. Las preguntas 4 y 5 de dicho referendo, consultaban a la población si respaldaban la política del presidente Mesa para utilizar el gas como un recurso estratégico para recuperar una salida útil y soberana al océano Pacífico y sobre la exportación de gas en el marco de una política nacional.
En julio de ese año, 60,06% de la población habilitada para sufragar participó del referéndum.