Señalan que las exautoridades durante la transición, son responsables de haber desperdiciado la oportunidad de eliminar al masismo de la política boliviana.
Tras el intercambio de acusaciones entre exministros de Estado durante el gobierno transitorio, el diputado por la agrupación Creemos, José Carlos Gutiérrez, criticó duramente a las exautoridades que perdieron la “oportunidad histórica” de erradicar al Movimiento al Socialismo (MAS) del escenario político nacional.
Asegurando que al pueblo boliviano le importa poco las disputas entre exministros, Gutiérrez se refirió al reciente intercambio de acusaciones entre exautoridades del gobierno de Jeanine Añez.
En criterio del legislador opositor, las exautoridades durante la transición, son responsables de haber desperdiciado la oportunidad de eliminar al masismo de la política boliviana, permitiendo que el MAS continúe dañando al país hasta la fecha.
“Roxana Lizárraga y Arturo Murillo, ambos protagonistas en el gobierno de transición de Jeanine Añez, cargan con la responsabilidad de haber dejado escapar la oportunidad de deshacerse del MAS. Ellos rifaron nuestra libertad y, con ello, condenaron al país a seguir bajo la sombra del MAS”, declaró Gutiérrez.
El diputado también señaló que el gobierno de Añez, en su conjunto, es en parte responsable de la actual situación política en el país, al no cumplir su único mandato de convocar a elecciones “ahora sufrimos las consecuencias. Son responsables de rifar la posibilidad de que se acabe con el MAS”, sentenció.
Esta semana, los exministros Arturo Murillo y Roxana Lizárraga, se enfrascaron en una polémica, debido a sus acciones durante el gobierno transitorio.
Desde la privación de libertad en Estados Unidos, Arturo Murillo arremetió contra Roxana Lizárraga, después de que la misma brindó su versión sobre los hechos de 2019 y la actitud del entonces ministro de Gobierno y el entramado de poder que había forjado.
“No por estar preso permitiré que nadie, mucho menos gente descalificada como Lizárraga, mienta sobre mí”, expresó Murillo mediante su cuenta en la red social X.
Posteriormente, Lizárraga tildó a Murillo de “delincuente” y lo acusó por haber perjudicado la gestión de Jeanine Añez y hasta dejarla arruinada.
En declaraciones a la red Erbol, Lizárraga señaló que, a diferencia de Murillo, ella puede decir que nunca utilizó un centavo de los bolivianos para fines personales. “Ensuciaste toda la gestión de Añez y la arruinaste a ella. Ayudaste al retorno de la dictadura. Hay un Dios que todo lo ve. Y yo confío en él”, sostuvo la exautoridad.
Sobre el tema, la expresidenta Añez sostuvo que los delitos en los que hayan incurrido exfuncionarios de su gobierno, son individuales y deben ser asumidos por sus autores. “Nunca se socapó o encubrió a nadie. Estoy con la conciencia tranquila porque sé que hice lo correcto. Salvamos al país de una guerra civil y llamé a elecciones, que era lo que correspondía”, señaló la expresidenta mediante sus redes sociales.
Lizárraga se desempeñó como ministra de Comunicación, mientras que Murillo ocupó el cargo de ministro de Gobierno durante el gobierno de transición, luego de semanas de lucha de los bolivianos que salieron a las calles exigiendo respeto de su voto, ese movimiento permitió la renuncia de Morales, quien había ostentado el poder por más de 14 años.