El tribunal también ha condenado a cadena perpetua a otros 12 terroristas, mientras que varios menores han sido condenados a diez años de prisión tras un juicio que se ha prolongado nueve meses contra al menos 320 yihadistas naturales de países como Siria, Túnez o Sudán, según han recogido los diarios locales.
Estado Islámico ha estado activo en Libia desde la revuelta que acabó con el régimen de Gadafi en 2011. El grupo terrorista tomó el control de la ciudad costera de Sirte en 2015, pero lo perdió en 2016 por una ofensiva de fuerzas locales con apoyo de la aviación de guerra estadounidense.
Libia se encuentra dividido en dos administraciones después de que la Cámara de Representantes diera por finalizado el mandato del primer ministro de unidad, Abdul Hamid Dbeibé, por el aplazamiento de las elecciones presidenciales en diciembre de 2021 y nombrara para el cargo a Fazi Bashaga, recientemente suspendido en el cargo y reemplazado por el ahora ministro de Finanzas, Osama Hamad.
Dbeibé fue elegido como primer ministro por el Foro de Diálogo Político Libio (LPDF) en febrero de 2021, con lo que sustituyó al hasta entonces primer ministro de unidad, Fayez Serraj, quien aceptó ceder sus competencias tras el proceso de consultas, iniciado después de un acuerdo de alto el fuego después de que las autoridades de Trípoli rechazaran la ofensiva militar lanzada en abril de 2019 por el general Jalifa Haftar, alineado con las autoridades asentadas en el este. (Europa Press)