Consideran que la condena es fruto de “un juicio que no puede ser considerado justo ni libre de ningún modo”, y señalan que el veredicto debería ser anulado.

Varias ONG internacionales se han pronunciado sobre la “indignante” condena impuesta este viernes por la Justicia rusa contra el periodista estadounidense Evan Gershkovich, sentenciado a 16 años de prisión en una colonia de máxima seguridad por delitos de espionaje, si bien gran parte de la comunidad internacional insiste en su inocencia.
Desde Reporteros Sin Fronteras (RSF) han emitido un escueto comunicado en el que su directora de Campañas Internacionales, Rebecca Vincent, aseveró que la condena es fruto de “un juicio que no puede ser considerado justo ni libre de ningún modo”, y señala que “el veredicto debería ser inmediatamente anulado”.
“Los periodistas no son espías, y combinar periodismo con espionaje tiene implicaciones enormemente peligrosas para la libertad de prensa. Atacar a Gershkovich de esta manera es otro ejemplo flagrante de la inaceptable toma de rehenes estatales por parte de Rusia”, añadió Vincent, que insta directamente a Washington a “hacer lo que esté en su poder” para garantizar la liberación del periodista y su regreso sano y salvo a casa.
En la misma línea, el director de programa del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), Carlos Martínez de la Serna, afirma que la condena “por cargos falsos” contra Gershkovich es igualmente “indignante” y ha defendido que “los periodistas no son peones en los juegos geopolíticos”.
Asimismo, Martínez de la Serna se ha adherido a la postura defendida desde Reporteros Sin Fronteras y exigió el fin inmediato de la llamada “diplomacia de rehenes”, una política con la que Rusia trata de presionar a otros países, en este caso Estados Unidos, para conseguir la liberación de otros rusos presos.
Por otro lado, la organización Amnistía Internacional ha lanzado una publicación en su perfil oficial en la red social X, donde incide en que los cargos presentados contra el reportero estadounidense son “dudosos” y la condena es fruto de “un juicio secreto en un sistema de justicia penal abusivo”.
“Rusia persigue la disidencia, trata el periodismo y la libertad de expresión como un delito. Esta condena debe ser revocada”, ha manifestado Amnistía, un extremo defendido también por la ONG Human Rights Watch, que pide la “liberación inmediata e incondicional” del periodista estadounidense.
Un tribunal de Rusia condenó este viernes a 16 años de prisión en una colonia de máxima seguridad al periodista estadounidense, detenido el año pasado en la ciudad de Ekaterimburgo y acusado de espionaje, cargos por los que se exponía a una sentencia de hasta 20 años de prisión.
Estados Unidos ha denunciado la “detención ilegal” del periodista, que trabaja para el diario estadounidense The Wall Street Journal, si bien la Fiscalía rusa aprobó recientemente el pliego de acusaciones sosteniendo que Gershkovich recopiló información sobre un contratista de defensa ruso a favor de los servicios estadounidenses.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró en febrero que existía la posibilidad de liberar a Gershkovich, siempre y cuando observara “pasos recíprocos” por parte de las autoridades del país norteamericano. Tras ello, el Kremlin confirmó “contactos” con Washington en torno a un posible intercambio de prisioneros. (Europa Press)