Advierten del “éxodo sin precedentes” de venezolanos si el régimen no acepta su derrota este domingo.
Una posición de Estado al margen de ideologías y se exija al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que reconozca el resultado de las elecciones presidenciales del próximo domingo es el pedido de la oposición venezolana, tomando en cuenta que todos los sondeos apuntan a una victoria del opositor Edmundo González.
“Pedimos una posición de Estado”, resume en declaraciones a Europa Press, Estefanía Parra Anselmi, miembro del Comando Global con Venezuela, la campaña en apoyo a la candidatura de González y a la líder opositora María Coriña Machado, quien asegura que han hecho llegar este mensaje a los “partidos constitucionalistas” españoles, incluidos PSOE y PP.
“Necesitamos la determinación de los líderes políticos sin importar las ideologías”, reivindica Parra, subrayando que “en Venezuela nos debatimos entre libertad y dictadura, entre derecho a elegir y autocracia”. En este sentido, desde la oposición lo que quieren es que la comunidad internacional acompañe a los venezolanos en su derecho a decidir y que exija a Maduro que reconozca el resultado que arrojen las urnas, que vaticinan que será de cambio.
La también coordinadora internacional de Voluntad Popular, el partido que lidera Leopoldo López, admite que “el reconocimiento del resultado electoral es el verdadero reto”, de ahí el que el acompañamiento de la comunidad internacional sea “clave”. Así las cosas, confía en que “no solo el Gobierno, sino todos los actores democráticos” en España asuman esta postura, dado el “liderazgo histórico” del país en lo relativo a Iberoamérica.
HABRÁ UN ÉXODO
SI MADURO NO ACEPTA
SU DERROTA
Parra ha subrayado que todos los sondeos vaticinan la victoria de Edmundo González por un amplio margen y advirtió de que si Maduro no acepta su derrota “lo que va a venir es un éxodo sin precedentes”. En la actualidad ya hay unos 8 millones de venezolanos en el exilio, buena parte de ellos en la región, pero también en torno a un millón que se encontrarían en España.
Así las cosas, la oposición prevé concentraciones el próximo domingo en las plazas de varias capitales de todo el mundo para visibilizar su gran capacidad de movilización y exigir el reconocimiento de los resultados de las urnas. En Madrid, la cita está prevista a las 20.00 horas en la Plaza de Colón y se invita a participar, vestidos de blanco, no solo a venezolanos, sino a otros iberoamericanos, así como a españoles que “crean en la libertad y la redemocratización de Venezuela”.
Por otra parte, la dirigente opositora ha denunciado las trabas que desde el Gobierno venezolano se han venido poniendo para que los venezolanos que residen en el extranjero puedan ejercer su derecho de voto.
Según Parra, de los 8 millones de exiliados, una cifra solo comparable con el número de desplazados por conflictos como los de Siria o Ucrania, unos 5 millones deberían poder votar en estas presidenciales, pero solo algo más de 69.000 han conseguido registrarse para hacerlo, algo “insólito”.
En este sentido, denunció que se han exigido “requisitos inconstitucionales” y que no figuran en la legislación electoral del país, entre otros por ejemplo el contar con pasaporte venezolano vigente cuando obtenerlo cuesta hasta 300 euros, a la hora de poder registrarse para votar en estas elecciones, como consecuencia de lo cual en España solo podrán hacerlo 24.000.
Aunque queda menos de una semana, los venezolanos en Madrid aún no conocen dónde tendrán que acudir a depositar su voto. Según ha explicado, en la capital deberían votar unos 9.000, tanto de esta región como de otras próximas y serían necesarias 17 mesas electorales.
Tampoco en el caso de Vigo, donde deberán hacerlo 2.300, saben dónde. Pese a todo, Parra ha dejado claro de que el régimen puede tener “la infinita certeza” de que también van a superar estos obstáculos como ya ha ocurrido con otros, como el hecho de la inhabilitación de Machado, elegida como candidata en las primarias de la oposición, y el impedimento para registrarse de Corina Yoris, a quien la primera había designado como su sustituta. (Europa Press)