El régimen chino aseguró ayer que está realizando ejercicios militares conjuntos con Rusia, después de que una alianza de defensa occidental liderada por Estados Unidos se reuniera en Washington y Japón advirtiera sobre una creciente amenaza de los fuertes vínculos de Beijing con Moscú.
El Ejército Popular de Liberación (EPL) envió un récord de 56 aviones de guerra sobre la línea media del estrecho de Taiwán en un día, de acuerdo a un reporte del periódico South China Morning Post.
El Ministerio de Defensa chino dijo que los dos ejércitos (el chino y el ruso) habían comenzado los ejercicios, llamados “Joint Sea-2024”, a “principios de julio” y que durarían hasta mediados de este mes.
Los ejercicios en las aguas y el espacio aéreo alrededor de Zhanjiang, una ciudad en la provincia sureña de Guangdong, tienen como objetivo “demostrar la determinación y las capacidades de las dos partes para abordar conjuntamente las amenazas a la seguridad marítima y preservar la paz y la estabilidad global y regional”, indicó el Ministerio.
Añadió que los ejercicios “profundizarán aún más la asociación estratégica integral de coordinación entre China y Rusia para la nueva era”. Según el Ministerio, se llevaron a cabo de acuerdo con el plan anual de compromiso militar de Beijing y Moscú.
El anuncio se produjo la misma semana en que los líderes de la OTAN se reunieron en Washington para reafirmar su apoyo a Ucrania en medio de la invasión rusa.
China y Rusia se acercaron en los últimos años y promocionan que su amistad “no tiene límites”, y ambos comparten relaciones hostiles con la OTAN.
Los líderes de la OTAN dijeron en un reclamo que China se había convertido en un facilitador decisivo de la invasión de Ucrania por parte de Moscú, lo que llevó a Beijing a advertir a la OTAN contra provocar la confrontación.
China sostiene que no es parte en el conflicto de Ucrania, pero fue criticada por los líderes occidentales por brindar apoyo político y económico a Rusia, incluso en el comercio de bienes con usos tanto civiles como militares.
Las fuerzas chinas también están realizando ejercicios esta semana con Bielorrusia, otro aliado de Rusia, en la frontera oriental de la OTAN. Pero Japón sostuvo ayer que las actividades conjuntas China-Rusia cerca de su territorio plantean una grave preocupación desde la perspectiva de la seguridad nacional.
Por su parte, Zhang Xiaogang, portavoz del Ministerio de Defensa Nacional chino, se limitó a afirmar que “recientemente, la formación del portaaviones Shandong realizó un entrenamiento de combate real en altamar en aguas pertinentes de acuerdo con los planes anuales de entrenamiento de la Armada del EPL (Ejército Popular de Liberación), lo cual está en línea con las leyes y prácticas internacionales y no tiene como objetivo un blanco específico”.
“En el futuro, la Armada del EPL organizará regularmente ejercicios similares para mejorar continuamente la capacidad de combate sistemático de su formación de portaaviones”, concluyó. (Infobae/Agencias)