Niños que escapan de sus casas con la intención de ganar dinero fácil con el narcotráfico, señoritas que declaran en medios su intención de ser narcos y legalizar las drogas, además incontables adolescentes y jóvenes que transportan cocaína de una ciudad a otra, pero ¿por qué ellos quieren dedicarse al peligroso mundo de las drogas?

En entrevista con EL DIARIO, el psicólogo experto en psicología clínica y de la salud, Marcos Pérez Lamadrid, explicó los factores psicológicos que están detrás de las razones expuestas por estos niños y jóvenes. “Debido a su edad, niños, adolescentes y jóvenes están en la búsqueda de pertenencia, identidad y tener un propósito de vida para ser reconocidos por un grupo”, agregó.

Además, debido a que la corteza prefrontal en el cerebro acaba de formarse a los 23 a 24 años de edad, a jóvenes les es difícil inhibirse, planificar y no ser impulsivos, complementó el experto.

¿Existen patrones psicológicos entre jóvenes atraídos por el narcotráfico (narco)?

A medida que crecemos en la familia, nos da la sensación de protección y confianza para explorar el mundo. Si uno tiene un apego más saludable va a poder decidir y aprender de sus errores. Pero si está en un entorno de apego inconsistente, el joven va a buscar algún grupo que le proporcione confianza. Esta es una de las razones por la cual jóvenes son atraídos, por la validación y reconocimiento en grupos criminales.

¿Qué perfiles psicológicos son susceptibles de ser atraídos por el narco?

Por mis investigaciones, tomemos la Teoría de los 5 Factores de Personalidad. Gente con niveles bajos de amabilidad y que no le interesa tener vínculos con los demás, que no se pone nervioso o no tiene miedo, poco responsable en sus proyectos, alta apertura a la experiencia, que están demasiado tranquilos, que pasó por experiencias traumáticas y las sufre de manera solitaria porque no tiene un entorno social que le contenga y, por lo tanto, tienen menos oportunidades de lidiar contra la incertidumbre. Estas características activan las radicalidades de personalidad.

¿Cómo prevenir que jóvenes sean tentados por el narco?

Con la esperanza. Porque uno quiere saber a dónde quiere ir y cuál es su propósito y, así, tener la confianza para usar sus recursos (de carácter) adquiridos en su niñez. En este caso, dedicarse al narco es un camino, no es un fin para llegar a algo más.

¿Y cómo cultivar la esperanza en los jóvenes?

Preguntándoles cuáles son sus sueños y qué transformaciones están buscando en sus vidas, más allá de lo que se quieren dedicar. Ellos mismos encontrarán otras alternativas que asociarse a delincuentes.

¿Cómo impacta el narco en la salud mental de los jóvenes?

Entre los que entran a ser parte de o ser consumidores, pienso que pierden la esperanza porque les hacen ver que el único camino que existe es el de estar en el narco.

¿La falta de oportunidades educativas y laborales dirige a jóvenes al narco?

Desde mi experiencia clínica, me parece que nuestro sistema educativo y empresas públicas y privadas necesitan dar más espacios para la innovación, con concursos que premien con pasantías y becas a los escolares.

Darles la confianza de que ellos son capaces de dar respuestas a problemáticas, como el propio narcotráfico. La clave para que la humanidad sobreviva y salga adelante está en el poder innovador que tienen los jóvenes.

¿Qué rol tiene la psicología en la rehabilitación y reinserción de jóvenes involucrados en el narco?

La psicología ofrece la oportunidad de retomar la esperanza, de activar su mejor versión, encontrar un propósito de vida, (incluso) puede convertir a las personas en, como solemos decir, veteranos de guerra con la sabiduría de haber pasado por estas problemáticas y salir adelante.