Consideran que negar el visado a personas que necesitan movilizarse por cuestiones familiares y de salud es una forma de negar sus derechos básicos, pues ellas también contribuyen y trabajan para el crecimiento del Estado español.
> De acuerdo con la periodista que sigue los casos, Elizabeth Jiménez, a ninguna de las personas que reportaron estos inconvenientes les fue devuelto el dinero invertido en el proceso de solicitud, montos que suponen una suma considerable para el ciudadano promedio.
Inexplicablemente, varias personas que recientemente solicitaron un visado Schengen por razones humanitarias o de salud, sufrieron el rechazo de sus pedidos pese de haber cumplido con las garantías y requisitos solicitados; la periodista, Elizabeth Jiménez Landívar, planteó que la diplomacia del Estado intensifique gestiones para que se elimine este trámite que supone grandes esfuerzos económicos y de tiempo para los solicitantes.
En entrevista con EL DIARIO, Jiménez explicó que muchos casos corresponden a personas que necesitan movilizarse a territorio europeo, a través de España, por razones ajenas al mero turismo, por lo que “el consulado español, al negar la visa a estas personas, está negando también derechos básicos a parte de la población sudamericana, familiares de personas que viven, trabajan y contribuyen al crecimiento de España”.
En un artículo escrito por la comunicadora, se detallan varios casos recientes de personas que vieron sus solicitudes de visas ser denegadas, en muchos casos habiendo cumplido con todos los requisitos. Denunció que, pese a que varios solicitantes son nacionalizados españoles, contribuyen al seguro social e incluso garantizan la cobertura de todos los gastos, el documento les fue negado igualmente y los montos no fueron devueltos.
“Este tipo de visas no responden al turismo convencional, a motivos de trabajo u otros ordinarios; por lo tanto, debieran extenderse por un sentido de humanidad y solidaridad”, señaló.
En su criterio, no existe una razón que justifique estas medidas, por lo que pidió a los medios de comunicación hacer un seguimiento constante a estos casos y exigir un pronunciamiento de las autoridades correspondientes, pues debería al menos devolverse el dinero que la gente invierte en solicitar la visa.
“Es muy importante que la prensa haga seguimiento de estos procesos, pregunte a los representantes de la legación española por qué se actúa de esta manera y también a representantes de organismos de derechos humanos porque son casos que realmente llevan, en sí mismos, dramas familiares y personales de los cuales no se está hablando”, comentó.
Asimismo, el lento o nulo avance en las gestiones diplomáticas es un factor que también permite que estos inconvenientes continúen, lo cual supone un serio perjuicio para las personas, daña la imagen del país, además de contribuir a marginar al Estado de procesos de integración e intercambio con otras regiones del mundo, según Jiménez.
De acuerdo con el artículo, los requisitos más comunes son: demostrar solvencia económica, expresada en 100 euros diarios para gastos de estancia; prueba verificada de alojamiento; evidencia de que el solicitante regresará al país de origen (pasaje de retorno, compromisos familiares o laborales demostrables, contratos vigentes, etc.); y contar con un seguro de viaje.
La publicación también resalta que “la obtención de la cita para presentar la documentación demora dos o tres meses” y que “si alguno de estos requisitos no se cumple, lo más probable es que la visa sea rechazada”.
ELIMINAR TRÁMITES
La periodista opinó que en Bolivia debería ser eliminado el trámite de visado para viajar a España, en vista de que juntar los requisitos es costoso, complicado y demandan mucho tiempo; por ello, pidió al Gobierno boliviano tomar mayor conciencia en el asunto.
Agregó que la mayoría de países de la región actualmente ya no solicitan el trámite. “Junto con Ecuador, Guayana y Surinam, somos los únicos países que necesitamos presentar un visado que autorice el ingreso al Estado Español. El resto de la comunidad sudamericana lo ha gestionado de manera conjunta”.
VARIOS CASOS
Jiménez reveló al menos cuatro casos recientes de ciudadanos bolivianos a los que les fueron negadas sus visas de ingreso al espacio Schengen, sin razón aparente, a pesar de que la mayoría cumplió con todos los requisitos solicitados por los países europeos.
“A una boliviana cuyo padre fue operado de cáncer, que solicitó por todos los medios que se le extendiera una visa para poder ir a verlo después de la operación, se la negaron. Dos (hermanos) nacionalizados españoles, que intentaron traer a su madre de 75 años de visita, con carta de invitación y garantía notariada de su mantenimiento en España, recibieron un rechazo de parte del Consulado de España”, reportó.
Asimismo, relató que una solicitud fue rechazada a otra boliviana enferma de cáncer que solicitó una visita de su madre, mientras que a otra persona que intentó traer a su padre, de 63 años, también le fue negado su pedido.
Lamentablemente, a ninguno de ellos les fue devuelto el dinero invertido en el proceso de solicitud, montos que suponen una suma considerable para el ciudadano promedio.