La Casa Blanca aclaró que en principio, la formación no se llevará a cabo en territorio estadounidense, sino que tendrá lugar en Europa. Fuentes de la Administración norteamericana prevén que este programa pueda comenzar en las próximas semanas y que se prolongue durante varios meses, según informan este viernes los principales medios de Estados Unidos.
Por su parte, Zelenski, recibió con satisfacción la histórica decisión de Estados Unidos y el presidente Biden de apoyar una coalición internacional de aviones de combate, en relación a esta iniciativa avalada también por el resto de líderes del G7, reunidos estos días en Hiroshima.
“Esto mejorará enormemente nuestro Ejército en el cielo. Cuento con discutir la implementación práctica de esta decisión en la cumbre G7 en Hiroshima, escribió en Twitter Zelenski.
Biden siempre se había mostrado reacio al envío de F-16 a Ucrania, pero finalmente accedió a un punto medio en el que los aliados europeos sí podrían exportar este tipo de aeronaves y también iniciar labores de formación. Gobiernos como el de Reino Unido ya se expresó en este sentido, como dejó claro recientemente el primer ministro británico, Rishi Sunak, al recibir a Zelenski.
Esta coalición de países, a la que se sumaría también Países Bajos, será quien decida los detalles de futuros envíos, incluidos cuántos cazas se entregan y cuándo. “Las discusiones para mejorar la capacidad de la Fuerza Aérea ucraniana reflejan nuestro compromiso a largo plazo con la autodefensa de Ucrania”, sentenciaron las fuentes.
Zelenski reclamó una coalición de cazas similar a la que ya sirvió previamente para que Ucrania recibiese tanques. Sin embargo, por ahora sólo Polonia y Eslovaquia dieron el paso de entregar aeronaves, aunque de tipo MiG-29, un modelo de la era soviética que, según Kiev, no cubre las necesidades en el campo de batalla. (Europa Press).