Asegurando que el gobernador cruceño, Fernando Camacho, fue privado de su libertad de forma ilegal, la fundación Global Human Rights League, pidió que la Organización de Estados Americanos (OEA) exija al Gobierno boliviano emitir un informe sobre las violaciones sistemáticas a los derechos fundamentales de la autoridad departamental desde el momento de su aprehensión.

Mediante una nota remitida al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, el pasado 28 de enero, la presidenta de esta organización, Eva Sara Landau, afirmo que los principios sobre la protección de las personas privadas de libertad en las Américas dicen claro que toda persona privada de libertad y que su país como en este caso Bolivia, sea miembro de la Organización de los Estados Americanos será tratada humanamente, con irrestricto respeto a su dignidad inherente, a sus derechos y garantías fundamentales, y con estricto apego a los instrumentos internacionales sobre derechos humanos.

“La razón por la que el gobernador Luis Fernando Camacho ha sido detenido y en todo caso secuestrado, no le quita sus derechos fundamentales como el derecho a la privacidad, es obligación del Estado boliviano conservar sus garantías fundamentales y que pueda ejercer sus derechos”, señala parte del documento.

Se sostiene además que el gobernador Camacho fue detenido ilegalmente y privado de atención médica a pesar de las pruebas sobre una enfermedad que padece, ha sido privado de visita de sus familiares, abogados y colegas, y por último su derecho a la privacidad también ha sido violentado. Los derechos fundamentales del gobernador han sido sistemáticamente vulnerados. Que luego y bajo presión con el pasar de los días le hayan permitido ejercer los derechos antes privados no quiere decir que no hayan sido violados.

“Le pedimos a la Organización de los Estados Americanos, que a través del embajador Héctor Arce designado por Luis Arce, exija explicaciones y una investigación al Estado boliviano sobre la cámara encontrada en la celda del gobernador, acto que sin duda ya pasa todo límite de tolerancia”.

Reconociendo que pedir algo al régimen autoritario que hoy gobierna Bolivia, siendo ellos quienes promueven estas violaciones a los derechos humanos, no puede ser un obstáculo para que, como organización independiente del Estado no podamos exigir que Héctor Zaconeta cumpla con su trabajo. Los bolivianos miembros de Global Human Rights League, tenemos el derecho de hacer denuncias por negligencia del embajador ante la OEA, recordando que él se debe al pueblo que es quien lo sustenta financieramente.

Creemos que la Organización de los Estados Americanos si puede hacerse escuchar, respetar y exigir. Lamentablemente los bolivianos tenemos un gasto innecesario con un embajador cómplice de las violaciones a los derechos humanos que hace de oídos sordos y tiene venda en los ojos.

Le pedimos Secretario Luis Almagro, tomar en consideración nuestra petición, para la tranquilidad de las familias bolivianas que hoy viven bajo miedo, persecución, amedrentamiento y extorsión política, finaliza la nota.