A las 6:30 horas aproximadamente, del viernes 27 de agosto de 2021, empezaba la jornada de Valentín P., un maestro que estaba a cargo de una unidad educativa; nunca pensó que ese día cambiaría el rumbo de su historia, ya que fue acusado por supuestamente envenenar a la madre de su hijo.
Como ya era rutina, Valentín se levantó a las 6:30, luego desayunó con su esposa y después la llevó a su lugar de trabajo y retornó a cocinar a su casa porque él trabajaba en el turno de la tarde.
Después de mediodía se arregló para ir a trabajar y participar de algunas reuniones que tenía. Cuando se dirigía a la unidad educativa donde trabajaba, a las 14:00, aproximadamente, recibió una llamada de su expareja quien le dijo, como días anteriores, que su hijo quería hablar con él, le explicó que no podía, pero insistió.
Para ese día, Valentín tenía programadas reuniones con la directora del turno mañana, con las señoras que vendían en el colegio y con los padres de familia.
En la última reunión, tuvo la opción de revisar su teléfono móvil, allí leyó un mensaje de su expareja que decía: “A qué hora podrás hoy, responde”, asimismo se percató que tenía una llamada perdida del mismo número.
Más tarde, a las 18.40, aproximadamente, le llegó otro mensaje en el que le decía: “Estamos en el Multicine, cuánto tardarás para esperarte, el José necesita hablar contigo”. Él respondió: “Voy a tardar unos 20 minutos o un poco más, pero tendría que ser un momento porque tengo otras actividades”.
Tras el intercambio de mensajes, Valentín se excusó de la reunión, porque además del encuentro con su hijo, tenía que asistir a su clase virtual de las 19.00 horas.
A las 18.50, aproximadamente, Valentín llegó al Multicine, y al no verlos en la puerta de ingreso, llamó a su expareja quien le dijo que lo estaban esperando en un espacio entre una farmacia y una pastelería.
Se encontró con su hijo y le preguntó de qué quería hablar con él, el menor le pidió que le compre otra computadora porque la que tenía se arruinó. Valentín le explicó que de momento no podía pero que vería su presupuesto y haría todo lo posible por comprar otro equipo.
Su hijo insistió y le dijo: “Para qué tienes un hijo si no lo vas a mantener, son 10 años que no me diste plata, no conozco ni un regalo de voz” y se puso a llorar.
Ese momento Valentín aclaró a su hijo que él le daba un monto mensual a su mamá y ella debiera ver que no le falte nada. En ese momento, la ahora víctima, se puso “nerviosa”, y dice que quiere ingresar al baño. Valentín dice que se tiene que retirar, sin embargo ella insiste que la acompañen y que cuide a su hijo mientras ingresa al mingitorio.
El menor y su padre se quedaron a solas, y ahí nuevamente le explicó con más calma que de momento no podía comprar el equipo, el menor entendió la explicación, a los dos minutos volvió su mamá y Valentín se despidió de ambos a las 19.10 horas, aproximadamente.
Después del encuentro, Valentín volvió a su casa y pasó sus clases virtuales de la universidad, a la que ingresó con un poco de demora.
MUERTE
Ese mismo día el fiscal departamental de La Paz, William Alave, informaba que se investiga un hecho de feminicidio registrado en el Multicine de la ciudad de El Alto.
La víctima había sido auxiliada al Hospital del Norte con signos de haber sido envenenada, presuntamente por su expareja, Valentín P., de 40 años.
El entonces fiscal de Delitos Contra la Vida de la ciudad de El Alto, Favio Maldonado, señaló que el 27 de agosto de 2021 a las 19.40, aproximadamente, la mujer fue ingresada a sala de emergencias del Hospital del Norte por su hermana, un policía y un guardia de seguridad, quienes refirieron que estaba convulsionando al interior del Multicine.
Los médicos, luego de atender a la víctima, indicaron que ella realizaba movimientos involuntarios, debido a que habría ingerido alguna sustancia tóxica y que pese a los esfuerzos falleció.
De acuerdo con los antecedentes del caso, cuando la víctima fue atendida por los médicos les dijo que “mi esposo me dio esto a beber, me ha envenenado” y les entregó una botella plástica pequeña, que contenía un poco de agua con una sustancia desconocida.
No obstante, de acuerdo a la pericia de huellografía realizada por el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), en diciembre de 2021, a la botella que presuntamente le dio Valentín a su expareja, la misma no tiene huellas.
“Que de acuerdo al análisis realizado en huellografía forense a través de aplicación de polvo revelador de huellas (Sirchie – HifiVolcano .Silk Black – Cat Nº 101 l1), se llega a la conclusión de que no existen huellas dactilares latentes en la botella signada como E-1 (una botella plástica pequeña vacía con inscripción Vital 350 ml), de acuerdo a la descripción del acta cadena de custodia”, se le en el informe pericial.
Asimismo según el informe pericial en toxicología no se pudo encontrar ninguna sustancia tóxica en la botella de agua que supuestamente le entregó Valentín.
BODA NO REALIZADA
La esposa de Valentín, presume que la víctima quería impedir su matrimonio religioso que estaba previsto para el 4 de septiembre, una semana después del supuesto feminicidio.
La mujer considera que la expareja de su esposo había preparado todo para aparentar un posible delito de feminicidio en grado de tentativa, empero no contó que demoraría la atención en el centro médico y llegara a perder la vida.
El 31 de agosto de 2021, Valentín se presentó a la Fiscalía para declarar voluntariamente, ya que a través de medios de comunicación se enteró del deceso de la madre de su hijo.
Horas después fue imputado por el delito de feminicidio y enviado con detención preventiva, por tres meses, no obstante continúa con la medida extrema sin que hasta ahora hayan demostrado su responsabilidad, refirió su esposa.
“La señora ha tomado agua en el baño, hay pruebas de cámaras donde se la observa hablando con el encargado, hay una parte donde parece que el niño le entrega un sobrecito antes de que entre al baño. Se ve en las imágenes que ellos (el menor y su madre) están manejando botellas de agua y mi esposo en ningún momento entra con botellas, solo con su celular y no saca nada de su mochila, los videos están claritos. No hay nada en los videos, ellos llegaron mucho antes y ahí se los ve manejar botellas de agua”, dijo.
La esposa de Valentín lamentó que algunos medios hayan desinformado, cuando dijeron que su esposo estaba prófugo, porque la realidad es que ellos no se habían enterado de lo que pasó y al saberlo, él fue quien se presentó voluntariamente a declarar.
“Hay pruebas que demuestran su inocencia pero hasta ahora no valoran. Todas las pericias arrojan a la inocencia de mi esposo porque en la botella no han encontrado veneno, como encontraron en el cuerpo de la víctima. Inicialmente hablaron de dos botellas, una que era para el niño y otro para la mujer. Una botella se lo llevaron a la Felcc (Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen) y la otra botella había agarrado la madre (de la víctima), incluso en el velorio habían tomado eso para calmar sus nervios y nos les ha pasado nada, eso ha dicho ella (madre de la víctima) en su declaración”, dijo.
Refirió que de acuerdo al examen médico forense, en el cuerpo de la víctima se encontró estricnina (sustancia venenosa de sabor amargo que se extrae de la nuez vómica y otras plantas), cuyo acceso no es fácil y deberían investigar también quién adquirió y de dónde.