Lamentaron que el gobierno priorice temas de su agenda política, como las pugnas internas del oficialismo, en vez de prestar atención a la creciente crueldad con la que son asesinados las mujeres y niños.
Señalan que “los tres niveles del Estado han abandonado la prevención de violencia de género y también la prevención de violencia hacia los niños”.

Con más de 85 feminicidios y 34 infanticidios registrados en Bolivia durante el 2024, varios de ellos cometidos con extrema violencia, la Red Ciudadana Contra el Abuso Sexual Infantil y Violencia lamentó que el Gobierno haya preferido privilegiar asuntos políticos en vez de aplicar medidas para prevenir y reducir la brutalidad contra estos sectores de la población.

El discurso de estabilidad y crecimiento o las pugnas internas del Movimiento Al Socialismo (MAS) fueron parte de la agenda política que el gobierno de Luis Arce prefirió tocar en la presente gestión, dejando en el olvido la defensa de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, observó la abogada de la Red, Jessica Echeverría.

La jurista lamentó que las casi 90 mujeres asesinadas este año son el resultado del incremento de la violencia en Bolivia, un país donde existe una “agenda política” en la que no está incluido el tema de la prevención contra la violencia en ninguno de los niveles del Estado.

“El delito de violencia (doméstica e intrafamiliar) es el más denunciado a nivel nacional y lastimosamente no les interesa a los municipios, ni a la Gobernación. Los tres niveles del Estado han abandonado la prevención de violencia de género y también la prevención de violencia hacia los niños”, señaló Echeverría a ANF.

La abogada recordó la crueldad con la que varios agresores acabaron con la vida de sus parejas, concubinas y compañeras este año, como el caso de Kamila Pacassi, una joven de 24 años que fue brutalmente asesinada por su compañero de curso en una escuela de profesores en Caranavi, en La Paz.

En otro caso, una menor de 14 años fue asesinada por su supuesto concubino de 28 años de edad en Ivirgarzama, localidad ubicada en el trópico de Cochabamba. El caso resonó por las críticas hechas a la familia por permitir que la adolescente mantenga una relación con un hombre que le doblaba la edad.

“Nos preocupa que en este año, en Cochabamba como en La Paz, se han dado casos de extrema violencia respecto al feminicidio. Han sido casos muy duros y quedaron en la mirada del país. (…) Esa menor estaría con vida si es que hubiera tenido padres que hubieran cumplido con su deber de protegerla”, manifestó la entrevistada.

INFANTICIDIOS

A la fecha, son 34 casos de infanticidios que fueron registrados en el país en la presente gestión. Esta semana, un bebé de un mes de edad fue introducido en una olla con agua caliente por su propia madre, en la localidad de Yamparáez, en Chuquisaca; todo sucedió en presencia del hijo mayor.

En otros casos, una madre de 39 años envenenó a sus dos hijos con una sobredosis letal de medicamentos, para luego estrangularlos a muerte, en la zona Alto Chijini de la ciudad de La Paz. No conforme con intoxicarlos, la mujer asfixió a sus hijos con sus propias manos.

En marzo, un sujeto fue condenado a 30 años de cárcel sin derecho a indulto tras confesar que quitó la vida a sus dos hijos, de dos y cuatro años de edad, degollándolos con un cuchillo de cocina, luego de una discusión con su pareja en Villa Dolores, en la ciudad de El Alto. Una cámara de seguridad registró al hombre atacando a su familia, mientras los menores suplicaban por su vida.

Asimismo, sonaron varios casos de infantes que fueron encontrados sin vida y abandonados en basureros y en plena vía pública, a semanas o incluso días de haber nacido. Estos casos llamaron la atención por la creciente crueldad con la que se trata a las criaturas.

Echeverría señaló que estos hechos deben llamar la atención de las autoridades de los tres niveles del Estado, así como de la Defensoría de la Niñez, la cual carece de personal capacitado para atender todos los casos.

“Debemos preguntarnos qué está pasando y qué sucede con el Gobierno. Lo que vemos es una falta de prevención. ¿Dónde están las Defensorías de la Niñez? Por ejemplo, en este último caso, no es el único hijo que tiene la mujer, sino tiene otro de tres años que ha sido testigo de este hecho. ¿Qué se ha hecho hasta el momento para evitar este caso? Lastimosamente, dejan mucho que desear porque no atienden las llamadas”, protestó.