Velasco reportaba una manifestación de conductores de vehículos públicos de la ciudad de El Alto que llegó hasta La Paz, y mostró su desacuerdo con la realización de un foro destinado a ordenar el tráfico vehicular con ataques a la sede del encuentro organizado por el Gobierno Municipal.
Los enfurecidos manifestantes golpearon con brutalidad a participantes de la reunión y trataron de evitar que sus acciones sean grabadas y reportadas por los periodistas.
“Prensa mentirosa”, “¿cuándo dicen la verdad?”, gritaron luego de golpear a otros conductores de La Paz que acudieron a un llamado del alcalde paceño Iván Arias.
La periodista Velasco enfrentó verbalmente a las amenazas, los golpes y empujones de los manifestantes que además de agredir con adjetivos a los reporteros, usaron bebidas gaseosas para lanzarlas a los lentes de cámaras de video y de fotografía con la finalidad de impedir que sus actos de violencia queden grabados.
En un intento de proteger a su camarógrafo, Peter Quispe, la periodista recibió la pedrada y quedó en el piso donde recibió asistencia de sus colegas, mientras alrededor los violentos transportistas amenazaban con el despojo de teléfonos móviles y con golpizas.
La periodista señaló a la Unidad de Monitoreo de la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) que todos los periodistas en el lugar fueron víctimas de agresiones verbales, empujones, patadas, hostigamiento e incluso de intento de sustracción de sus teléfonos de parte de los movilizados.
Nos lanzaron bebidas gaseosas “para dañar nuestros equipos de trabajo y alejarnos del lugar”, afirmó Velasco.
A pesar de no sufrir daños físicos de consideración, la periodista rechazó las acciones de violencia de manifestantes contra los trabajadores de la prensa que realizan la cobertura informativa en las calles.
Desde la madrugada del, choferes del Sindicato Pedro Domingo Murillo, Sindicato Mixto de Transporte, Unión y Progreso, Sindicato 27 de Mayo, entre otros de la ciudad de El Alto se movilizaron en el centro paceño, bloquearon las principales vías en rechazo a una Cumbre de Transporte que convocó la Alcaldía de La Paz.