El padre de la exautoridad, aseguró ayer que su hijo fue notificado para declarar como testigo en el denominado caso golpe I, cuando ya se encontraba en Brasil, por lo que solicitó, a través de un memorial, cumplir con su declaración de manera virtual porque se encuentra fuera del país.
“Le dije que no venga, que no hay estado de derecho, que aquí no hay garantía, aquí se inventan procesos. Una justicia completamente capturada. Yo le dije a mi hijo que no puede venir”, dijo Justiniano desde el aeropuerto internacional Viru Viru, horas antes de su viaje al vecino país, a DTV.
Por otro lado, la diputada de oposición Laura Rojas manifestó que el Movimiento al Socialismo (MAS) se dedica hacer persecuciones políticas a familiares de los presos políticos, por lo que pidió al exministro de la Presidencia obedece a su progenitor y no volver al país.
“Hay una persecución política contra opositores (…) la justicia responde a intereses solamente del MAS porque en otros casos de corrupción, narcotráfico y muchos otros temas vemos total impunidad. La justicia es concentrada totalmente en perseguir opositores”, dijo Rojas.
En similar criterio, las diputadas de oposición María Fernanda Álvarez y Luciana Campero, manifestaron que el Gobierno a través de la justicia busca defenestrar a la oposición con la nueva “persecución política”.
Jerjes Justiniano Atalá fue ministro de la Presidencia en la gestión de Jeanine Añez, entre noviembre y diciembre de 2019, y luego fue reemplazado por Yerko Núñez, tras 22 días en el cargo.