“El Ministerio de Defensa ha logrado que los radares sean entregados como un sistema integrado, funcionando y con garantía de dos años”, dijo Novillo en diciembre pasado.
En 2016, Bolivia firmó un contrato de 191.074.809 euros con la empresa francesa Thales Air Systems para la adquisición e instalación de 13 radares de defensa y control aéreo.
Supuestamente los radares cubren el 100 por ciento del espacio aéreo del territorio nacional y tienen la tecnología para identificar a las aeronaves que planean a bajas alturas para evitar ser detectadas, pero el primer mes del año se registraron dos casos de avionetas bolivianas vinculadas a la actividad del narcotráfico que fueron atrapadas en Paraguay.
“En cuanto a los radares, nosotros estamos en proceso de implementación. Es un proceso de implementación que necesitamos trabajar con el Ministerio de Obras Públicas. Ya estamos avanzando en eso, tanto con la DGAC (Dirección General de Aeronáutica Civil), que tiene que homologar cada uno de los puntos radares, y también con Naabol (Navegación Aérea y Aeropuertos Bolivianos), porque el trabajo es de manera conjunta. Es decir, el servicio de los radares si bien va ser administrado por la Fuerza Aérea, el servicio se lo hace también a través de Naabol para el espacio aéreo y la aviación comercial interna”, argumentó Novillo.
A principios de semana, la diputada del Movimiento al Socialismo (MAS) Ninoska Morales, el diputado de Comunidad Ciudadana (CC) Saúl Lara y el diputado de Creemos Henry Gutiérrez cuestionaron la situación y efectividad de los radares que fueron adquiridos por el Estado para tener control del espacio aéreo. Cuestionaron al ejecutivo de la cartera de Defensa y anunciaron que insistirán para que la autoridad responda sobre la situación de esa tecnología.
ERRORES
En entrevista de fecha 2 de agosto de 2022, el coronel en servicio pasivo del Ejército, Jorge Santistevan, manifestó a EL DIARIO que el gobierno de Evo Morales cometió errores que se subsumen en delitos, en la adquisición de estos radares.
El primer error en criterio del militar en servicio pasivo es haber conformado un equipo de políticos sin experiencia y allegados al Ministerio de la Presidencia para la adquisición de radares.
Otro error identificado es de orden presupuestario, al no tomar en cuenta los costos de la implementación y montaje de los equipos y radares en los puntos estratégicos del país, con la respectiva infraestructura y personal capacitado de planta.
Otro error tiene que ver con el orden logístico porque no previeron, antes de la adquisición, el material de vuelo y aeronaves de interceptación, tripulación, así como energía autónoma para el funcionamiento de los radares y tampoco tomaron en cuenta elementos de rigor.
“No tomaron en cuenta la capacitación de los operadores, ya que los técnicos franceses capacitaron personal y algunos de ellos ya se jubilaron, incluso otros fueron cesados de sus funciones. La construcción de infraestructura para el personal y los equipos, como galpones, hangares, oficinas, depósitos de materiales, barreras de seguridad para las antenas, paneles de control y otros”, precisó.
Asimismo dijo que no se ha previsto el contrato de personal para asegurar que el sistema funcione las 24 horas del día durante todo el año sin pausa, un mínimo de 600 personas entre civiles y militares.
“No se ha previsto el presupuesto para el pago de salarios y consumo de energía permanente y la adquisición de aviones de interceptación aérea similares a los súper tucanos del Brasil; de manera tal que a las mencionadas falencias e incapacidad actual del Gobierno se suma la falta de interés para no implementar este sistema de control aéreo por cuanto de ello depende la interdicción al narcotráfico, situación que tampoco les conviene a los cocaleros liderados por Evo Morales, porque el 95 % de la hoja de coca ingresa a la factoría de drogas, (cocaína, clorhidrato de cocaína y pasta base). Mientras tanto se mantendrá la intensidad del narcotráfico sobre el espacio aéreo boliviano principalmente sobre la franja delimitada por el sud-este boliviano y el nor-oeste paraguayo por cuanto son los dos únicos Estados de la región sudamericana que no cuentan con el sistema Sidacta de control del tránsito aéreo”, advirtió. (EL DIARIO y ANF).