Después del mediodía de ayer, los productores marcharon hacia Villa El Carmen con dirección al mercado de Arnold Alanes, dirigente afín al Movimiento al Socialismo (MAS), pero no pudieron llegar porque un número considerable de efectivos policiales cuidan ese centro de acopio desde que inició el conflicto, hace más de tres semanas.
Después que fueron gasificadas y orilladas a retroceder de su marcha, las productoras de coca se pusieron de rodillas pidiendo a los policías que se retiren de la zona de Villa Fátima.
“De una vez mátennos, somos de la zona ancestral, no somos narcotraficantes. Están cuidando lo ilegal, están cuidando el narcotráfico. Nosotros los yungueños somos zona ancestral, no somos narcotraficantes como sus jefes del Chapare (…) Qué les estamos haciendo para que nos metan balín”, dijo una mujer que yacía en el piso.
Mientras que otra, entre llanto dijo que tienen impotencia. “De una vez mátennos, yo estoy dispuesta aquí a morir de una vez. Yo no sé con qué voy a criar a mis hijos. Si quieren matarme, quiero que me maten. Ya no quiero saber nada, de una vez mátennos”.
USO EXCESIVO
DE AGENTES
La Defensoría del Pueblo advirtió que se deterioran las vías de comunicación y el diálogo para solucionar este conflicto.
Las, aproximadamente, 600 personas que participan de esta movilización fueron dispersadas tras la intervención de efectivos policiales que utilizaron agentes químicos para ese cometido. Los cocaleros movilizados, por su parte, emplean materiales explosivos que son detonados de forma constante.
Una nota de prensa de la Defensoría refiere la afectación de una persona que fue impactada por una granada de gas en su rostro, a la altura de la ceja derecha, que le provocó un corte de un centímetro, aproximadamente; la misma fue asistida por vecinos.
En el Hospital La Merced, el personal defensorial constató que el gas lacrimógeno empleado para dispersar al sector movilizado, afecta a los pacientes. En ese centro de salud no existe un reporte de personas heridas atendidas en el lugar.
En ese marco, la Defensoría del Pueblo exhorta a las instancias estatales competentes a viabilizar los mecanismos para reencaminar el diálogo, a fin que se restituya la paz y cese la afectación a las personas que desde hace semanas son afectadas por los enfrentamientos y el uso de agentes químicos y los artefactos explosivos.
ASAMBLEA
Por otro lado, Alanes convocó a una asamblea y posteriormente una marcha con banderas blancas para pedir la pacificación de Yungas, para el próximo 25 de agosto.
La asamblea se desarrollará en puertas del mercado, en el ex Colegio Andino, cerca de la Terminal Minasa donde se evaluará la situación y el persistente conflicto. No descartó que se pueda plantear ir a elecciones para elegir a la nueva dirigencia de Adepcoca.