“Hemos probado que somos inocenten en la comisión de cualquier delito. Tengo 32 años de servicio y en ningún momento hemos cometido delitos ni faltas administrativas. Estamos liberados de toda culpa y eso nos da la posibilidad de seguir trabajando”, dijo Quelca en conferencia de prensa.
La abogada Mary Carrasco que patrocina a la exautoridad indicó que su defendido fue ofendido públicamente y que una pugna política y la “ambición” de tener un cargo de parte de la exviceministra Aurea Balderrama hizo que todo esto llegue a estos “extremos”.
El caso fue iniciado a denuncia de la entonces viceministra de Educación Superior, Aurea Balderrama, porque presuntamente el ministro de Educación habría enviado instrucciones mediante WhatsApp a un alto funcionario para favorecer o perjudicar a determinados postulantes en el proceso de designación de cargos directivos.
En noviembre de 2021, se supo que la Fiscalía había imputado a Quelca por el delito de incumplimiento de deberes y pidió su detención domiciliaria.