De acuerdo a reportes policiales, el sujeto de 27 años, dopaba a sus víctimas invitándoles refresco. Una vez dormidas las llevaba a alojamientos y moteles, donde las dejaba abandonadas, después de violarlas.
La Policía secuestró una motocicleta, refrescos con sustancias somníferas, además de diferentes tabletas como clonazepan, novadol, entre otros.
La Policía no descarta que más víctimas se sumen a las de las tres mujeres que fueron captadas buscando trabajo.