Jang Hur políglota y especialista en derecho internacional, lamentó que en el desarrollo del juicio los miembros del tribunal les hayan rechazado la presentación de pruebas y limitado el tiempo de los alegatos finales.
“Yo no firmé los contratos, tampoco tuve relación con el Estado, ¿por qué me dieron 12 años de sentencia? Algunos festejaron con la sentencia porque ya cumplieron su condena, solo a mí me dieron 12 años. Dicen que me enriquecí ilícitamente. Recibí un cheque de 147.000 de la empresa, no del Estado, pero dicen que la plata salió del Estado y por ello es ilegal. Es absurdo porque el Estado no puede decidir en qué puede gastar una empresa que fue contratada”, dijo.
Apuntó que la única vez que tuvo relación con el Estado fue cuando fue jurado electoral en una elección. “Nunca fui funcionario público”, aseguró.
Otro delito por el que fue acusado fue por asociación delictuosa, no obstante aclaró que él fue parte de una empresa y no de una “pandilla delictiva”. Los miembros de la empresa que firmaron el contrato fueron sentenciados a nueve, cuatro y dos años de prisión.
De acuerdo a la lectura de la parte resolutiva que hizo el juez Jaime Arteaga Balderrama, los ciudadanos Lee Young Sik, Parksong Gi, Lee Jong Soo, Jung Chun Sub, Lee Sang Kuyk, Lee Jae Ho, Kwak Chong Ho, quienes firmaron el contrato de las barcazas chinas, fueron sentenciados a dos y cuatro años con seis meses de privación de libertad, respectivamente. Todos fueron juzgados en rebeldía. Algunos fueron acusados por los delitos de asociación delictuosa y los otros por asociación delictuosa y contratos lesivos al Estado.
En tanto el exjefe militar Freddy Alberto Ballesteros Quiroga fue acusado por los delitos de contratos lesivos al Estado, conducta antieconómica e incumplimiento de deberes, por lo que fue condenado a nueve años de prisión en el penal de San Pedro de La Paz.
El exjefe militar fue procesado debido a que en su calidad de gerente general de la Empresa Naviera Boliviana (Enabol) firmó un contrato con empresas coreano-chinas para la compra de las barcazas y remolcadores en 2009.
DATOS
El 2009 a través de Enabol se suscriben contratos para la adquisición de 16 barcazas y dos empujadores (remolques), proyecto por el que se hizo el pago de alrededor de 30 millones de dólares, al inicio de la obra (el 100 por ciento del proyecto), sin embargo el 2011 tras que se vencieran las boletas de garantía, los trabajos quedaron paralizados y China se quedó con los diseños a través de sus empresas estatales, que posteriormente – según Hur – con esos mismos diseños vendieron 144 barcazas a Brasil y ocho empujadores a Paraguay.
Hur que fue abogado de la empresa coreana General Marine Bussines Bolivia SRL. (GMB), reveló que China obtiene ganancias con los diseños que le pertenecen a Enabol, poniendo en duda, de que la caducidad de las boletas de garantías, no se debió solamente a un “error de interpretación” y que habrían sido forzadas.
En diciembre del 2009, mediante la subrogación de contrato, la empresa Enabol, dependiente del Ministerio de Defensa, firma contrato con la empresa GMB, quién para ejecutar el proyecto, incluye en el contrato a la empresa pública China National Electronics Import and Export Corporation (Ceiec), quien a través de su sucursal en la provincia Shang Dong, como Co-Constructor, y son ellos los que presentaron las boletas de garantía para ejecutar el proyecto y son los únicos legalmente autorizados, para exportar las barcazas y los empujadores, del astillero en China.
EMPRESA CHINA
NATIONAL ELECTRONICS
IMPORT AND EXPORT
SHANG DONG
Corporation (Ceiesdc) es la que administró el 100 por ciento de los recursos económicos, para pagar a los proveedores y contratistas, además de supervisar, la construcción de las 16 barcazas y los dos empujadores para Enabol, obteniendo ganancias solo por la administración de los pagos, siendo que cobran una comisión bastante alta.
La empresa pública de China, al administrar los pagos para la construcción de las barcazas también tenía acceso a las tecnologías, planos y diseños, como se establece en los contratos, dichos diseños fueron elaborados por una empresa coreana en co-diseño con una empresa americana (Warino Cox, en Misissippi-Estados Unidos). Al momento en que se vencen las boletas de garantía, paralizan los trabajos y se quedan con el dinero y los diseños.
Para Hur se forzó la caducidad de las boletas de garantía “es imposible que una institución como el BCB (Banco Central de Bolivia) haya cometido un error que favorece con millones de dólares y con la consecuente entrega total del proyecto al Estado Chino, mediante sus empresas operadoras, sin recibir nada a cambio”.
“EL uso de los planos de Enabol y de la tecnología y patentes americanas y coreanas por los chinos, se consolidó con la entrega de todos los planos de las barcazas y empujadores a las empresas Chinas, ellos ya comenzaron a vender empujadores con el diseño pagado por Enabol, compra realizada con un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) (…) y muy reclamado por los países interamericanos, como Argentina, Paraguay Brasil, ya que estos recursos deberían ser destinados a fortalecer las empresas de los países miembros y no a la Industria China, pero la construcción el know how, fue transferido junto con los diferentes planos que son por derecho pertenecientes a Enabol, ahora los utilizan las compañías constructoras Chinas para construir y vender barcos en La Hidrovia Paraguay Paraná”, dijo Hur.
PARTICIPACIÓN CHINA
A través de la empresa pública China National Electronics Import and Export Cor-poration, con su sucursal en Shang Dong, el gobierno chino participó de manera legal en el proyecto de las barcazas para Bolivia.
La empresa China National Electronics Import and Export Shang Dong Corporation (Ceiesdc), es una compañía que pertenece a la República Popular de China y bajo sus leyes, es la única autorizada para exportar ese tipo de bienes de manera legal, ya que ni el astillero donde se construyeron las barcazas, cuenta con autorización para exportar bienes por sí mismos.
Carlos Hur cuestionó el que se haya entregado por parte de la empresa China Ceiesdc todos los pagos de la construcción de los empujadores, cuándo no se terminaron, además que aún se tiene pendiente la devolución del dinero retenido por impuestos, “ahora se entrega todo el proyecto nuevamente a las empresas chinas, siendo prohibido comunicarse con los verdaderos contratistas y proveedores”.
ACCIONES LEGALES
El junio de 2017, el entonces ministro de Defensa, Reymi Ferreira, informó que se inició un proceso ante el Ministerio Público en contra de la empresa China National Electrics Import and Export Corporation, argumentando que asumió otro tipo de funciones, además de emitir las boletas de garantía para el proyecto.
Explicó que a partir de una auditoría, que contrató Enabol, se pudo detectar, el manejo de recursos económicos del proyecto, por parte de la empresa china.
En el proyecto no se pudo consolidar una supervisión directa, por parte del comprador (Enabol), debido a que no se tenía disponible un ingeniero naval con la experiencia, las autorizaciones y capacitaciones necesarias, por ello se creó una figura alternativa, el residente de obra (en el astillero), una persona con la capacitación necesaria para realizar ciertas tareas, capacitarse en cuánto se desarrolla el proyecto y contar con cierto poder para realizar ciertas actividades.
Carlos Hur indicó que en varias oportunidades, comisiones conformadas por varios ministerios, realizaron viajes de inspección a los astilleros, entre ellos la Procuraduría General del Estado, Enabol, el Ministerio de Defensa, este último en varias ocasiones enviaron al director jurídico del Ministerio de Defensa, “gastando miles de dólares, en pasajes y viáticos y en abogados que no solucionaron nada”, pero no fue el Ministerio Público, a pesar de que fue invitada de manera oficial.
BOLETAS DE GARANTÍA
Las boletas de garantías para la construcción de 16 barcazas, y dos remolcadores para Bolivia, tenían una vigencia de 11 meses, a partir de la firma del contrato de adenda (el 11 de diciembre del 2009) y en caso de incumplimiento de contrato por parte de la empresa constructora se podría ampliar por seis meses de manera automática, previa notificación de Enabol, mediante el Banco Central de Bolivia (BCB), con un sistema Swift autenticado, antes de la fecha de expiración (el 11 de noviembre de 2010).
El 26 de octubre de 2010, Enabol solicitó mediante una nota, la ampliación del plazo, pero el BCB, no cumplió con el protocolo establecido en las cartas de crédito y no envió el Swift, al banco de China, para la ampliación del plazo.
En el documento de la boletas de crédito de garantía QDB2010LG00004 y QDB2010LG00005 señalan la vigencia de 11 meses, desde la fecha de firma de la carta de adenda del 10 y 11 de diciembre de 2009, o hasta que los bienes navíos hayan sido entregados y aceptados por Enabol.
El 26 de octubre de 2010, Enabol mediante nota DAF/ UF/Tesorería N° 034/2010 solicitó al BCB, la ampliación del plazo, de la vigencia de las boletas de crédito de garantía.
El BCB como ente “avisador”, debía comunicar al Banco de China con código Swift la ampliación, como señala el protocolo de las cartas de crédito de garantía, pero no lo hizo, poniendo en riesgo las garantías para la ejecución de las barcazas y remolcadores.
El 5 de mayo de 2011, Enabol envía la nota DAF/UF/Tesorería 040/2011 al BCB, con la intención de ejecutar la boleta de crédito Stanb By SB QDB2010LG00005, por el incumplimiento de contrato para la construcción de los dos remolcadores, sin embargo el Export-Import Bank of China informó que la boleta ya había expirado el 11 de noviembre de 2010.