Frente al ataque de avasalladores de tierras que provocó heridas en el periodista Juan Carlos Fortún, la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) expresó condena y demandó de la Policía el cumplimiento de su función específica de preservar la vida y la seguridad de las personas.
El enviado del diario cruceño El Deber, cubría, en la mañana de ayer 8 de diciembre, el enfrentamiento entre vecinos que se organizaron para echar a los avasalladores del predio privado Centro Turístico Kim, localizado a 12 kilómetros al sureste de la ciudad de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.
La ANP denunció que Fortún registraba la acción de los avasalladores que incendiaron la maleza, en un terreno muy próximo a una refinería de carburantes, y luego atacaron a los vecinos superando el cordón policial que se improvisó en el lugar.
En el intento de alejarse del lugar, el periodista cayó y de inmediato recibió el impacto de una piedra en la cabeza, y golpes en diversas partes del cuerpo. Los agresores además de provocarle una herida en la cabeza, aprovecharon para despojarlo de sus pertenencias y equipo de trabajo.
La ANP lamentó que el hecho de violencia contra un periodista se registre ante la actitud pasiva de los efectivos policiales que no evitaron la acción contra el enviado de prensa.
Según la organización que representa a los principales diarios de Bolivia, el hecho demuestra que la Policía no cumple su función de ofrecer seguridad a las personas, menos a los reporteros que realizan su labor informativa en situaciones de conflicto.
El periodista Fortún fue trasladado a un centro médico, dónde le realizaron una sutura de ocho puntos para cerrar una herida en la cabeza causada por objeto contundente.
“Tengo el cuerpo adolorido debido a las múltiples contusiones que sufrí por el ataque con palos y piedras. Ahora debo realizarme una tomografía, para descartar otros daños en la cabeza”, dijo Juan Carlos Fortún a la Unidad de Monitoreo de la ANP.
El periodista lamentó haber sido “agredido por cumplir mi trabajo de prensa. Me atacaron tres personas; eran las 11.45 horas, y agradezco a los colegas y personas que me rescataron”, dijo a la Unidad de Monitoreo de la ANP.
A LA ESPERA
DE LA JUSTICIA
Por otro lado, la Policía informó ayer que está a la espera de que la justicia defina si los predios en conflicto son avasallados y se proceda al desalojo de las personas.
“Esperamos que la justicia a través de la Fiscalía y jueces determinen si este predio tiene propietario o es un área protegida”, manifestó Jorge Espejos, comandante de la Estación Policial 9, zona de Los Lotes, en la capital cruceña.
El uniformado aclaró que existe una investigación en marcha; sin embargo, es necesario que un juez defina la situación de los predios presuntamente avasallados.
“Si es que el juez ordena, inmediatamente intervenimos, pero mientras tanto no tenemos ninguna orden. Lo que estamos haciendo es evitar enfrentamientos y que no haya heridos ni muertos”, afirmó Espejos.