Las asociaciones representantes del periodismo observaron que las arbitrarias acciones en contra de un periodista, un tiktoker y un medio independiente parecen ser nuevo intento de restringir la libertad de expresión e instaron a las autoridades a respetar estos derechos fundamentales en democracia.
La Asociación de Periodistas de La Paz (APLP) y la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) expresaron su preocupación y denunciaron tres casos recientes en el que, según advierten, las autoridades buscan limitar la libertad de expresión y prensa.
En un primer caso, el periodista Juan Pérez Munguía fue injustamente detenido el jueves, por filmar el frente del Banco Central de Bolivia (BCB). Gracias a la intervención de las mencionadas asociaciones y ante numerosas críticas de la sociedad civil, Pérez fue liberado dos horas después.
“Durante su detención, los policías intentaron forzarlo a borrar las imágenes y a firmar un documento admitiendo haber cometido una falta, a lo que se negó con el respaldo de las asociaciones”, señala el pronunciamiento rubricado conjuntamente por la ANPB y la APLP.
Por su parte, la Asociación Nacional de la Prensa (ANP), representante de los principales diarios bolivianos, expresó su rechazo a toda acción que afecte al trabajo de reporteros y lamentó que la obtención de datos de interés público, fotografías e imágenes en movimiento en lugares públicos sea motivo de un estigma que afecta a la libertad de prensa.
El segundo caso mencionado es el de un portal de noticias que informaba diariamente sobre la fluctuación del precio del dólar, que fue obligado a cerrar bajo acusaciones de “infundada” especulación financiera.
Las asociaciones aseguraron que informar sobre la variación del precio del dólar paralelo no constituye especulación financiera y que el cierre del portal no resolverá la discrepancia entre el precio del dólar paralelo y el oficial.
“El cierre de este portal no logrará que el precio del dólar paralelo baje al precio oficial de 6.96. Por el contrario, la falta de información real sobre el precio del dólar paralelo podría incluso hacer que éste aumente”, expresaron.
El tercer caso refiere al creador de contenido en TikTok, Rubén Blanco, quien enfrenta dos procesos penales por incitación al racismo y discriminación debido a comentarios que hizo sobre la danza potosina de los mineritos. El sujeto fue detenido y posteriormente se retractó públicamente.
Aunque la APLP y la ANPB no comentaron sobre los comentarios de Blanco, subrayaron que la difusión de opiniones forma parte esencial de la libertad de expresión. Ambas asociaciones enfatizan que no se puede arrestar a alguien por expresar una opinión que se mantenga dentro de los límites legales.
“Expresar una opinión sobre una danza u otra expresión cultural, aun de ser ofensiva, no debe ser tipificada como un acto de racismo ni discriminación y tampoco penalizarse. Cualquier discurso que pueda ser considerado intolerante debe ser cuestionado con medidas alternativas a las sanciones penales, tales como campañas de sensibilización y educación”, insta el pronunciamiento de la APLP y la ANPB.
Asimismo, las asociaciones reiteraron su compromiso con la defensa de la libertad de expresión y la prensa en Bolivia, e instaron a las autoridades a respetar estos derechos fundamentales.